Alejandro Cheyne fue desvinculado como rector de la Universidad del Rosario

La Consiliatura del Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario informó que Alejandro Cheyne fue desvinculado. En su lugar, la rectoría quedará en manos del vicerrector, Gustavo Adolfo Quintero Hernández.

¿Qué está pasando en la Universidad del Rosario?

En octubre de 2018, Cheyne fue nombrado el rector número 120 de la Universidad del Rosario. Para ese momento, el Colegio Electoral tomó la decisión con 13 votos, nueve de los Colegiales de Número y cuatro con los Consiliarios. Hace dos años, él fue reelegido como rector.

Los últimos días fueron controversiales al interior de la universidad por el despido masivo de docentes y personal administrativo. La comunidad universitaria se mostró inconforme por la situación y aseguró que los motivos radicaron en una mala gestión por parte del rector.

Entre los despidos, hubo varios docentes con una amplia trayectoria en la universidad, tales como Arlene Tickner y Manuel Quinche. Adentro del recinto se presentaron protestas por parte de los estudiantes.

La situación no quedó ahí. Un grupo de exrectores de la universidad le enviaron una carta a Cheyne, en la cual recomendaban su renuncia.

Guillermo Salah Zuleta, Rafael Riveros Dueñas, Hans Peter Knudsen Quevedo, José Manuel Restrepo Abondano y María del Rosario Guerra de la Espriella, fueron los rectores que se pronunciaron en la misiva.

Para tratar la situación, los exrectores se reunieron con Cheyne junto con cuatro de los los cinco consiliarios de la institución: Merlín Patricia Grueso, Martha Woodcock, Álvaro Salcedo y Alejandro Useche.

El mensaje de docentes y exrectores

“En el encuentro con el Rector, se conversó alrededor de la situación actual de la Universidad y las preocupaciones de los exrectores; así mismo, se le recomendó dar un paso al costado para poder iniciar el proceso de recuperación de la confianza y gobernabilidad, y continuar con la buena marcha de la Institución”, expuso la carta.

De igual forma, la comunidad docente del Rosario se refirió al respecto y presentaron un informe en el cual mostraron que el despido masivo respondió a las decisiones financieras tomadas erróneamente.

16 profesores de la Facultad de Economía estudiaron la situación financiera de la Universidad acorde al periodo 2016 – 2023.

En primer lugar, explicaron que el índice de liquidez es un indicador que permite medir la solvencia de la universidad, teniendo en cuenta los activos y pasivos corrientes. El Gobierno solicita que el indicador esté por encima del 1.2. Sin embargo, el cuerpo docente encontró que desde 2019, la institución no ha cumplido con ese criterio, lo cual hace que la universidad no pueda pagar sus pasivos corrientes.

Si bien encontraron que la universidad cuenta con suficiente capacidad de endeudamiento, los docentes encontraron que la institución no puede pagar los intereses adeudados con la operación, haciendo falta 97 centavos adicionales por cada peso para lograrlo. El excedente operacional del Rosario en 2023 fue negativo e igual a $17.209 millones de pesos.

El cuerpo de docentes también señaló que desde el 2020 las inversiones de la universidad se han reducido en un 50%. Teniendo en cuenta esos aspectos financieros, los expertos señalaron que el Rosario cayó en un problema de solvencia y pago de los intereses de las deudas, lo cual conllevó a sustituir el capital humano por el físico y así emprender un proceso de despidos continuos.