Procuraduría cerró centro de reclusión en Buenaventura por condiciones de salubridad
Dándole cumplimiento a la función preventiva, la Procuraduría concretó el cierre de Isla Naval, un establecimiento donde alojaban personas privadas de la libertad.
Noticias RCN
02:20 p. m.
El lugar en cuestión estaba ubicado en las instalaciones de la Estación de Guardacostas Primaria de Buenaventura. Allí, alojaban personas privadas de la libertad.
Procuraduría ordenó el cierre en junio de 2024
Al momento de inspeccionar el lugar y los procedimientos que se llevaban a cabo, el ente de control identificó que la población privada de la libertad era capturada en alta mar y custodiada por guardacostas en la isla naval.
Los trámites eran realizados por ellos. Estando en el centro de detención transitorio, las personas eran testigos de la carencia de condiciones y el grave estado de hacinamiento.
El 10 de junio, la Procuraduría le solicitó a la Armada, Ministerio de Justicia, Inpec y administración municipal de Buenaventura, el cierre del centro de reclusión.
Javier Sarmiento, procurador delegado para la Defensa de los Derechos Humanos, presentó la solicitud tras visitar las instalaciones. Por causa de las deficientes condiciones y hacinamiento, los privados de la libertad tenían riesgo de padecer enfermedades, tales como paludismo, gastritis, complicaciones respiratorias y alergias en la piel.
Estado de las instalaciones en Isla Naval
Entre los detenidos, había 19 extranjeros y siete colombianos. Todos están a la espera de definir su situación jurídica y migratoria. Sin embargo, el ente de control indicó que deben cumplir este proceso en un espacio cuyo alojamiento sea óptimo.
“Hacemos un llamado urgente para que se defina el traslado de estas personas a un centro de detención transitoria o un establecimiento de reclusión y se realice el cierre definitivo del espacio de reclusión”, dijo el procurador delegado.
Tras la visita, el órgano de control confirmó que no había condiciones que garantizaran los derechos de las personas. Las celdas no tenían ventilación adecuada, la atención médica era nefasta y el brote de enfermedades estaba disparado.
Más de un mes después, la Procuraduría logró el cierre del centro transitorio. A su vez, organizó el traslado de las personas que se encontraban allí.