Fue condenado un presunto responsable de la desaparición de cinco firmantes de paz en Nariño
Tras su sentencia, la Fiscalía también logró condenar un caso de intento de homicidio contra un firmante de paz en Putumayo.
Noticias RCN
02:00 p. m.
Este lunes 19 de agosto, la Fiscalía General de la Nación obtuvo dos condenas contra los responsables de graves crímenes cometidos contra firmantes de paz en Colombia.
Estos casos, que involucran desapariciones forzadas y tentativas de homicidio, reflejan los continuos desafíos que enfrentan aquellos que han dejado las armas y buscan reintegrarse a la vida civil en un contexto de seguridad precaria.
Condenado presunto responsable de la desaparición de cinco firmantes de paz en Nariño
Un juez penal condenó a Jorge Eliécer García Estupiñán a 34 años de prisión, luego de que la Fiscalía General de la Nación presentara pruebas contundentes que lo señalaron como responsable de los delitos de desaparición forzada y concierto para delinquir agravado.
García Estupiñán, identificado como un presunto líder intermedio de la organización criminal conocida como Los de Vaca o Resistencias Unidas Campesinas (RUC), participó activamente en la desaparición de cinco firmantes de paz. Los hechos ocurrieron el 14 de octubre de 2017 en la vereda Isupí, ubicada en el municipio de El Charco, Nariño.
Según la investigación, las víctimas fueron capturadas por individuos armados que las acusaron de desobedecer las directrices impuestas por la organización criminal en esa región; posteriormente, los cinco hombres fueron amarrados y llevados por un río, y desde entonces no se ha tenido noticia alguna sobre su paradero.
Fue condenado otro hombre por atentar contra la vida de una firmante paz
En otro caso, la Fiscalía también obtuvo una sentencia condenatoria contra Ferney Andrés Cuaspur Chacua, quien aceptó su responsabilidad en un intento de homicidio contra la firmante de paz Leidy Lorena Pasu Ceromeca.
Este incidente ocurrió el 16 de noviembre de 2023 en Mocoa, Putumayo, cuando Cuaspur Chacua, armado con un arma de fuego, atacó a Pasu Ceromeca en su propia residencia, dejándola gravemente herida.
Su proceso culminó con un acuerdo entre la defensa y la Fiscalía, que fue aprobado por un juez penal especializado de Mocoa, quien lo condenó a 9 años y 1 mes de prisión, además de imponerle una inhabilitación para ejercer funciones públicas durante el mismo período.