Denuncian ante la Fiscalía el uso del cepo contra seis menores indígenas en Bogotá

La Secretaría de Integración Social dio a conocer que seis menores entre los 11 y 14 años, fueron sometidos al reprochable castigo del cepo por parte de la comunidad indígena Emberá que se encuentra resguardada en la UPI de La Rioja.

El cepo es un aparato denominado ancestral el cual inmoviliza las piernas y obliga a estar en el suelo a las personas castigadas durante el tiempo que determine esta medida correctiva de la comunidad.

Asimismo, indican que tras realizar la verificación de la situación, denunciaron estas acciones ante la Fiscalía General de la Nación para que los responsables sean investigados los delitos de violencia intrafamiliar y/o maltrato mediante restricción de la libertad física.

Señalan que el uso de la justicia tradicional no puede aplicarse en instalaciones del Distrito, puesto que "como mínimo, no se cumple el factor territorial". Además, "se encuentra prohibida cualquier práctica que atente o ponga en riesgo los derechos de niños, niñas y adolescentes".

Los menores habrían estado consumiendo sustancias psicoactivas

De acuerdo a lo reportado por el Distrito, los funcionarios se dieron cuenta de esta situación debido a que uno de los menores no estaba presente en el Centro Amar donde tenían actividades programadas. Allí, les manifestaron que estaba en el cepo y esta era la razón de su ausencia.

Cuando llegaron hasta La Rioja, evidenciaron que eran seis menores a los que recientemente habían liberado del castigo, el cual habría sido aplicado debido a que al parecer estaban consumiendo sustancias psicoactivas, informaron junto al ICBF y la Secretaría de Salud.

El llamado a la comunidad indígena en Bogotá para detener estas prácticas

"Integración Social insta la población Emberá, que habita en la unidad, a detener estas prácticas de maltrato a los niños, niñas, adolescentes y jóvenes, y a utilizar el diálogo y el afecto como las mejores lecciones para la crianza de sus hijos", dicen en una nota de prensa.

"Se ha evidenciado de manera recurrente la práctica de castigos físicos mediante el uso del cepo en la unidad operativa en niñas, niños y adolescentes, y con esto un claro incumplimiento de las disposiciones constitucionales", complementan.