Así operaba red de corrupción en batallón del Ejército: son siete los militares judicializados
La investigación de la Fiscalía señala que los uniformados se habrían apoderado de $200 millones, recursos destinados a la alimentación de los soldados.
Noticias RCN
10:32 a. m.
En las últimas horas fueron judicializados siete uniformados del Ejército Nacional señalados de apoderarse de recursos destinados a la alimentación de los soldados de un batallón de Norte de Santander.
De acuerdo con el informe de la Fiscalía, la situación fue descubierta por una serie de irregularidades detectadas en el suministro de alimentos en un batallón de infantería en Ocaña.
Por estos hechos fueron judicializados cuatro oficiales y tres suboficiales del Ejército Nacional.
¿Cómo operaba la presunta red de corrupción en batallón de Ocaña?
El ente acusador señaló que “los procesados se habrían aprovechado de las labores administrativas que ejercían en la unidad y falsificado planillas que daban cuenta de la entrega de raciones a uniformados que estaban en vacaciones o permisos”.
Los militares, que cumplían labores administrativas en la unidad militar, son señalados de gestionar, tramitar y apropiarse ilegalmente de $200 millones de pesos destinados a la alimentación y bienestar de los soldados.
Frente a las evidencias que los involucrarían en esta red de corrupción, fueron imputados por los delitos de peculado por apropiación y falsedad ideológica en documento público.
Los militares procesados no aceptaron los cargos y seis de ellos fueron cobijados con medida de aseguramiento privativa de la libertad domiciliaria y un capitán que continuará vinculado a la investigación.
¿Quiénes son los militares señalados en red de corrupción en Ocaña?
Se trata del teniente coronel Nelson Cuta Silva, los mayores Camilo Andrés Bonilla Bernal y Jefferson Alexander Silva Ruiz, el capitán Fermín Esteban Salinas Rodríguez, y los sargentos Jonathan Andrés Rojas Díaz, Leonardo Ciro López y Luis Edilson Torres Villa.
“Los elementos materiales probatorios indican que estarían implicados en cinco eventos delictivos en los que habrían generado y autorizado órdenes falsas de abastecimiento de víveres secos y frescos, las cuales permitieron la asignación y ejecución de partidas presupuestales”, indicó la Fiscalía.
Al mismo tiempo, explicó que “para dar apariencia de legalidad a la entrega de la totalidad de las raciones, presuntamente, usaron formatos que incluían los nombres de soldados que gozaban de permisos, vacaciones o turnos de descanso, o participaban en operaciones y estaban fuera de las instalaciones”.
Al parecer, estos documentos fueron consignados en los sistemas del batallón sin firmas o constancia de recibido por los comandantes de las patrullas o pelotones que debían certificar el suministro.