Regreso a clases en Norte de Santander: ¿Cómo las autoridades garantizan la educación de los niños del Catatumbo?

La situación de los desplazados en el Catatumbo sigue siendo una de las principales preocupaciones en Norte de Santander. Sin embargo, con el objetivo de restablecer la normalidad en la región, las autoridades del departamento han comenzado a trabajar en la reactivación de las actividades educativas, especialmente en las zonas más afectadas por la violencia y el desplazamiento.

Retorno gradual a la normalidad en el Catatumbo

El gobernador de Norte de Santander, William Villamizar, destacó que uno de los objetivos principales es garantizar la protección de los niños, niñas, jóvenes y docentes en la región para poder reanudar las clases de manera segura. Según Villamizar, las autoridades trabajan para restablecer las condiciones necesarias para que el servicio educativo sea prestado, especialmente en los cascos urbanos del Catatumbo.

El regreso a clases será gradual y se llevará a cabo conforme a la seguridad de los estudiantes y el personal educativo. Las actividades educativas se iniciarán en las áreas urbanas más cercanas, como Ocaña, Tibú y Cúcuta, donde ya se han habilitado aulas temporales para los estudiantes desplazados.

Apoyo a estudiantes desplazados en Norte de Santander

Mientras se restablecen las condiciones de seguridad en el Catatumbo, el gobierno departamental ha dispuesto medidas para atender a los estudiantes desplazados. En Cúcuta, se han acondicionado espacios en colegios y otras instalaciones para ofrecer clases a casi 500 estudiantes afectados por el desplazamiento forzado debido a los enfrentamientos en la región. La Secretaría de Educación de Norte de Santander, a través de la secretaria Xiomara Urón, aseguró que se están coordinando esfuerzos con el Ministerio de Educación Nacional para garantizar transporte escolar y la entrega de útiles escolares a los estudiantes.

A través de la declaratoria de emergencia económica y conmoción interior, las autoridades también han gestionado recursos adicionales para financiar estas iniciativas y garantizar la continuidad del servicio educativo a los más necesitados en el departamento.

La comunidad educativa de Norte de Santander se mantiene unida en la misión de asegurar que, a pesar de las dificultades, los niños y jóvenes continúen su formación académica en medio de la adversidad.