Exclusivo: las pruebas de la muerte de Juan Sebastián Arismendi en la Estación de Policía de Suba

La Estación de Policía de Suba tiene capacidad apenas para 60 personas y un hacinamiento del 266%, convirtiéndose en la más ocupada de Bogotá. Es recordada por los motines y la muerte de un interno: Juan Sebastián Arismendi. Algunos reclusos la han llamado ‘La estación del terror’.

El 1 abril de 2023 volvió a estar en la primera plana de la actividad judicial luego de conocerse que Arismendi, de 26 años, quien había ingresado hacía cuatro días por un presunto hurto calificado y agravado, tenía graves lesiones en su cuerpo y estaba al borde de la muerte.

"El patrullero que lo llevó a él (Juan Sebastián) es el que nos da la noticia de que él se autoflageló. Vía telefónica yo ese mismo día me comunico y anoche dicen que hubo una riña", expresó el hermano de la víctima. 

Horas después, el joven falleció en el Hospital de Suba. La Policía emitió un comunicado de prensa.

“Presuntamente falleció a causa de las lesiones sufridas el 01/04/2023, al interior de la sala temporal de privación de la libertad”, afirmó la minuta de las autoridades.

En sus declaraciones a la Inspección de la Policía, los uniformados que presenciaron lo sucedido ratifican la misma versión que le entregaron a la familia:

“Estaba en el baño, se resbaló y se cayó”, sentenció el Patrullero Leonardo Gómez:

“Después de haberle prestado los primeros auxilios, al tener el llamado de los demás ppl que decían que se había desvanecido en el baño”, fue la versión del Patrullero José Antonio Guevara.

“Mi sargento manifiesta una situación con un ppl en la celda dos, que se había caído en el baño y había quedado inconsciente y por eso llamaron una ambulancia. Según los uniformados, una caída en el baño le causó la muerte al joven”, señaló la Patrullera Luna Camila Alarcón.

Video de lo sucedido dentro de la Estación de Suba

Noticias RCN tiene todo el circuito de video del 1 de abril. El video empieza a las 8:00 de la mañana, hay dos patrulleros uno de ellos con una tabla pasando revista, y el otro verificando en la celda la ubicación de cada interno.

Segundos después, se acerca otro patrullero y se queda mirando fijamente la celda y hace un reporte con su radio. Desde ahí cambia la actitud de los patrulleros se quedan mirando fijamente la celda, al interior se ve lo que apartemente, sería una acción violenta. En repetidas ocasiones se ve este movimiento, frente a los uniformados.

Luego, comienza el movimiento de los internos de la celda. Uno con camisa blanca se mueve de lado a lado. Llega un tercer uniformado a la escena, y se ve un cuerpo cargado de un lado a otro en el interior de la celda.

A las 8:06 a.m., los uniformados se dispersan y queda la celda sin vigilancia. dos minutos más tarde se ve lo que aparentemente serían unos golpes hacia una persona lo cual activa de inmediato la reacción del uniformado.

A las 8:13, suceden dos cosas determinantes para el caso, llega la ración de alimentación que de inmediato es relevada y le piden al repartidor entrar a la oficina alterna; el segundo hecho es que se abre la puerta de la celda, decisión que sólo se toma ante una emergencia. Un uniformado ingresa, durante unos segundos se agacha a revisar el cuerpo de Juan Sebastián y sale corriendo de la estación a buscar ayuda.

Un minuto después, dos presos sacan el cuerpo de Juan Sebastián lo intentan ubicar en una silla, pero claramente no tiene plena conciencia en el momento.

Los uniformados en sus declaraciones dicen esto:

“Color pálido, las pupilas dilatadas, y como no tomé para mirar que tenía en su cuerpo, mi llamar era llamar a mi intendente, ubiqué un vehículo. Mi intendente Cepeda y un patrullero se quedaron”, agregó el patrullero Guevara, quien no vio brotes de sangre.

“Lo observe y me dieron orden de ubicar el vehículo. Se observó como si estuviera desmayado, pero se notaba que respiraba pero de resto nada más, no se notaba nada más”, concluyó el uniformado.

El video muestra lo contrario. En pantalla está el interno, con lo que parece una toalla color blanco limpiando de la cara de Juan Sebastián, lo que en un principio sería sangre producto de la intensa golpiza que padeció. Cuando termina de hacerlo la misma toalla tiene varias manchas. Y cuando bajan el cuerpo en total inconsciencia se observa la espalda con manchas oscuras, las cuales para los expertos serían golpes.

Sin embargo, los Policías mantenían su versión

“Dijeron que se había caído en la celda que, se había desmayado en la celda”, dijo el Patrullero Álvaro Riaño Espitia.

“Sí (le presté primeros auxilios), no lo observamos con ningún hematoma ni nada”, aseveró el Patrullero Gómez.

La teoría del baño no la respalda Medicina Legal: “Múltiples hematomas en cara cuerpo y extremidades, producto de una golpiza con objeto contundente y se observan rastros de tortura”.

Dos días después de estar en cuidados intensivos en el Hospital Simón Bolívar, Juan Sebastián falleció.

Los testimonios entregados por los policías, no corresponden a lo que se ve en el video, y a pesar del inmenso riesgo que representa entrar a una celda de la estación más hacinada de Bogotá, uno de ellos acepta bajo la gravedad de juramento que no están capacitados para esta función.

“Nos asignó para estas funciones y hasta donde tengo entendido no hay ninguna capacitación, el coordinador es una persona que lleva más, a veces no sabíamos cómo actuar. quien toma la decisión y toca tomar decisiones de manera oportuna”, afirmó el Intendente Eward Farid Alba.

La Procuraduría asumió el poder preferente de la investigación y tiene bajo la lupa la actuación de miembros de la policía.

Este miércoles la Fiscalía imputará cargos a 3 internos de la celda que tendrían relación con la muerte de Juan Sebastián.

Aunque se trata de un estación de paso, hay reclusos que llevan meses y ya ejercen control del lugar a su antojo.

Los familiares de Arismendi piden justicia. "La muerte de mi hermano no fue una muerte cualquiera, a él no solo lo asesinaron, a él lo torturaron", afirmó su hermano.