La ambición es enorme: así es como el Tren del Café apunta a convertirse en un tren interoceánico
El gobernador de Risaralda dio detalles sobre el proceso de reactivación del histórico corredor férreo, con una inversión inicial de 22.000 millones de pesos.
Noticias RCN
07:52 p. m.
La reactivación del Tren del Café sigue tomando fuerza. Recientemente, la Gobernación de Risaralda en articulación con las gobernaciones de Caldas y Antioquia, llevó a cabo una inspección al corredor férreo, en donde se confirmó la viabilidad del proyecto.
Aunque se indicó que la infraestructura existente presenta un estado general favorable, hace falta rehabilitación y dejaron claro que la viabilidad definitiva dependerá de los resultados de los estudios de mercado y de demanda actualmente en desarrollo.
De tren regional a conexión interoceánica
En diálogo con la Revista Semana, el gobernador Juan Diego Patiño sostiene que la clave del proyecto está en reincorporar el ramal Zarzal–Cartago–Caimalito–Pereira dentro del estudio preliminar del tren de occidente, pues inicialmente había sido excluido. Ese ajuste permitió estructurar una articulación mayor con Caldas y Antioquia.
El trazado proyectado permitiría enlazar Caimalito con el kilómetro 41, conectarse con plataformas logísticas en desarrollo y empalmar con la red férrea de Antioquia hacia Puerto Berrío. Desde allí, el sistema tendría salida hacia los puertos del Urabá antioqueño. En sentido contrario, se integraría a la línea que comunica con Buenaventura, en el Pacífico.
Por eso Patiño afirma que “estaríamos hablando de un tren interoceánico”: un corredor capaz de enlazar rutas férreas que permiten mover carga entre ambos océanos, complementando el transporte por carretera y ampliando la capacidad logística del occidente colombiano.
¿Qué sigue en el Tren del Café?
La inversión inicial de 22.000 millones de pesos está destinada a los estudios y diseños fase tres, determinantes para definir si el proyecto se ejecutará como infraestructura pública o mediante una iniciativa privada. Antioquia, a través de la Promotora de Ferrocarriles, asumiría el liderazgo de esa etapa, mientras Risaralda y Caldas aportan los insumos técnicos necesarios.
Adicionalmente, los departamentos buscan gestionar cerca de 2 millones de dólares ante la CAF para reducir sus aportes y acelerar el cierre técnico. La meta del gobernador es concreta: dejar los estudios en fase tres antes de 2027, un avance suficiente para tomar decisiones sobre su viabilidad real.