"La sociedad necesita hechos que demuestren la voluntad de paz de las Farc": De la Calle
Así se pronunció el jefe del equipo negociador del Gobierno en una reunión con el Partido Liberal.
Noticias RCN
10:40 a. m.
El jefe del equipo negociador del Gobierno en los diálogos de paz que se desarrollan con las Farc en La Habana, Cuba, Humberto de la Calle, criticó a la guerrilla por sus recientes ataques contra la comunidad indígena Nasa.
"No es ese el camino para llevarle a los colombianos el convencimiento de que realmente vamos a superar ese conflicto y que las Farc van a hacer dejación del uso de la violencia", declaró De la Calle en el Senado.
El jefe negociador mantiene desde el martes reuniones con los diferentes partidos políticos para explicarles los avances del proceso de paz, que cumplirá el próximo martes 19 dos años y que hasta la fecha han dejado tres preacuerdos sobre propiedad de la tierra, participación política y drogas ilícitas.
Para lograr la ansiada firma de la paz, faltan aún dos puntos, el primero de ellos el que se refiere al reconocimiento y reparación a los casi siete millones de víctimas del conflicto armado, sobre el que
actualmente se trabaja en la capital cubana.
Al comentar esos avances con los legisladores del Partido Liberal, De la Calle se refirió al asesinato por parte de guerrilleros de dos indígenas de la comunidad indígena Nasa, ocurrido en el departamento del Cauca la semana pasada.
"Ha llegado el momento de avanzar en las grandes decisiones, este es el momento. La sociedad necesita hechos concretos y gestos que demuestren que la voluntad de paz de las Farc es real", dijo.
Horas después del doble crimen, la Guardia Indígena detuvo a siete guerrilleros, dos de ellos de 14 y 17 años, que confesaron los asesinatos y a los que los unos 2.000 Nasa decretaron penas de prisión que van de los 40 a los 60 años y veinte latigazos para los menores de edad.
Las Farc reconocieron su responsabilidad y, en un comunicado explicaron que el crimen se debió a "una actitud incomprensible" de los indígenas que querían apoderarse de sus armas y detenerlos.
EFE