"Uno lee poesía para iluminarse": Piedad Bonnett, ganadora del Premio Iberoamericano Reina Sofía

En la literatura colombiana, una mujer que siempre deja el nombre del país en alto es Piedad Bonnett. Sus obras le han dado la vuelta a Latinoamérica y Europa, haciéndola merecedora de reconocimientos y elogios. Su estilo la ha hecho ser una de las voces más fuertes en la poesía castellana.

Bonnett fue galardonada con el XXXIII Premio Iberoamericano de Poesía Reina Sofía. El jurado valoró su poesía como muestra de trayectoria sólida y orgánica, con gran coherencia. La colombiana recibirá el premio en noviembre.

En A lo que vinimos estuvo la escritora, quien contó detalles del galardón que recibió y el papel que ha tenido la poesía en su vida.

Piedad. ¿Cómo recibiste este reconocimiento tan importante a nivel internacional, llamado por expertos como 'el Nobel de la poesía'?

“Con una sorpresa enorme y después con enorme agradecimiento. Sé que en habla castellana hay montones de escritores que se merecerían este premio. Hubo una avalancha de felicitaciones y cariño que me ha tenido muy contenta y un poco abrumada”.

¿Por qué cree que la eligieron?

“Premian una voz particular que hable de una manera sui géneris. Eso para mí es súper importante porque quiere decir que consideran que es una obra consolidada. Un escritor nunca tiene una perspectiva muy grande de su obra, de lo que significa. Siempre hay una grieta de incertidumbre. Estos premios le devuelven a uno la confianza en que lo que ha hecho”.

Piedad. ¿Cuáles son sus poemas preferidos?

“Como todo padre o madre, tengo mis hijos favoritos. El poema 'Mi padre' me gusta mucho, pero sé que al público le gusta mucho una poesía que se llama 'Las cicatrices'. Yo les recomendaría que lean 'Los habitados', mi último libro en donde trabajé los temas de 'Lo que no tiene nombre' en poesía. El dolor del suicidio y el duelo de una madre frente a una tragedia así”.

Cuando Patrimonio Nacional de España describe que su poesía es luminosa, ¿a qué se refiere con esa luz?

“Uno lee poesía para iluminarse, es decir, descubrir. Cuando un poema nos gusta mucho, nos estremece y queremos inmediatamente compartirlo. Eso es lo que suscita la poesía”.

“Tengo un verso que dice: 'Lo oscuro pare luz y eso consuela'. De la oscuridad más profunda, puede salir la luz de la belleza de la poesía”.