Refineria de Cartagena apoyó el mejoramiento de las instalaciones de un colegio de la ciudad

La emoción de los niños y niñas de la institución educativa Salim Bechara es la mejor recompensa para la Refinería de Cartagena, pues gracias a su apoyo se mejoraron los ambientes de aprendizaje de la Institución además del acompañamiento en mentorías. En alianza con la Fundación Mamonal, la Refinería de Cartagena adelantó el programa de voluntariado corporativo que hoy está arrojando estos frutos. Esta inversión es parte del compromiso de la compañía con su entorno.

Aunque el cambio físico de las instalaciones es lo más visible, el resultado no hubiera sido posible sin la participación y el compromiso de los 34 voluntarios de la Refinería de Cartagena que dedicaron 267 horas de su tiempo en el acompañamiento para el fortalecimiento institucional de esta escuela.

El proyecto está haciendo posible que 357 alumnos de la Institución Educativa Salim Bechara sede Albornoz y sus docentes, disfruten ahora de una renovada infraestructura y hayan mejorado su capacidad operacional. Los ambientes de aprendizaje mejorados incluyeron la sala de profesores, biblioteca, salones y oficina de Coordinación, además de realizar pintura interna a todo el colegio, dotación de mobiliario para docentes y mobiliario para almacenamiento de libros en los salones.

A partir de iniciativas como esta, la Refinería de Cartagena prioriza cuatro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible: Salud y bienestar, educación de calidad, Ciudades y comunidades sostenibles y Alianzas para lograr los objetivos. El programa de Voluntariado corporativo con el cual fue posible esta intervención integral en la Institución Educativa Salim Bechara sede Albornoz se desarrolló durante el segundo semestre de 2018 y ya fueron entregadas oficialmente las obras.

Operación y aporte al país

La refinería de Cartagena, que se encuentra a plena marcha, produce los combustibles más limpios de la historia de Colombia, con lo cual se une al compromiso de Ecopetrol de mejorar la calidad del aire para los colombianos. El diésel de ultra bajo azufre que se produce en la refinería de Cartagena ha permitido que Ecopetrol entregue este combustible en calidad internacional a los principales centros urbanos del país, es decir, de menos de 25 partes por millón de azufre (la regulación exige menos de 50 ppm).

Con relación a las gasolinas, las que se producen en la refinería de Cartagena tienen contenidos de azufre menores a 80 ppm, que también cumplen las más altas exigencias internacionales, cuando la regulación vigente en Colombia exige 300 ppm.

El complejo industrial de 34 unidades, que transforma el 97,5% del crudo en productos de valor, también le aporta al crecimiento de la industria manufacturera de Colombia y a la seguridad energética del país. El año pasado 34% del diésel y 23% de las gasolinas que se consumieron en el mercado local se produjeron en la refinería de Cartagena, lo cual se tradujo en ahorros para el país al reducirse la importación de combustibles, por aproximadamente US$2.000 millones.

En 2018 con una operación estable, la refinería de Cartagena aportó al desarrollo de la economía nacional y al mejoramiento del medio ambiente en las ciudades de Colombia.

Más noticias de Colombia y el mundo en NoticiasRCN.com - Síganos en nuestras redes sociales haciendo clic aquí: Twitter, Facebook, Instagram y YouTube.

NoticiasRCN.com