La Ruta del Naya: El corredor oculto del narcotráfico en el suroccidente colombiano
La Ruta del Naya se ha convertido en el camino perfecto para la transportación de cocaína, esto es lo que esconde la vía del Valle del Cauca.
Noticias RCN
07:33 p. m.
En medio de la densa selva del suroccidente colombiano, se extiende una vía conocida como la Ruta del Naya, un camino que conecta la parte alta de Jamundí, en el Valle del Cauca, con los municipios de Suárez y Morales en el Cauca.
Esta ruta, construida en secreto y sin autorización oficial, se ha convertido en un corredor crítico para el narcotráfico.
Un camino de narcos
Según informes recientes de inteligencia, por esta ruta se transportan grandes cargamentos de cocaína. La droga, producida y procesada en laboratorios clandestinos ubicados en la región montañosa, es llevada hasta las costas del Océano Pacífico.
Desde allí, es embarcada por los carteles con destino a Centroamérica y Estados Unidos. Este corredor es crucial para la operación de narcotráfico, facilitando el movimiento de cocaína desde su lugar de origen hasta los mercados internacionales.
“En esta región confluyen el narcotráfico, laboratorios de clorhidrato de cocaína y la producción de pasta a base de coca. Es una ruta principal para la exportación de drogas”, señala un informe de inteligencia.
Conflicto y control territorial
En los últimos meses, la Ruta del Naya ha sido testigo de una feroz disputa entre grupos armados ilegales. Las disidencias de las FARC, específicamente el naciente Frente 57 ‘Yair Bermúdez’, han estado en conflicto con estructuras del Bloque Occidental Jacobo Arenas, el Frente Adán Izquierdo y el Frente Dagoberto Ramos.
Estos grupos se pelean el control de la ruta y de los recursos generados en la zona, que incluyen cerca de 33.000 gramos mensuales de oro y más de 12 hectáreas de selva deforestadas, generando ganancias superiores a 38 millones de dólares al año.
Implicaciones para la seguridad
El coronel Javier Soler, experto en defensa y seguridad nacional, advierte sobre las graves implicaciones de esta situación. "Esto es muy delicado para la seguridad de todo el suroccidente colombiano porque de allí sale todo el narcotráfico que regresa en forma de armas, alimentando el conflicto armado en la región", explica.
Las autoridades señalan que la construcción de esta vía fue realizada por los mismos grupos armados. La magnitud del proyecto, que involucró maquinaria pesada y una organización logística considerable, plantea serias preguntas sobre la falta de control y supervisión estatal.
“Lo interesante aquí es analizar quién autorizó esta vía, cómo se construyó a la vista de todos con maquinaria amarilla, quién emitió los permisos o dónde estuvo la falta de control”, añade el coronel Soler.
La tragedia humana
Como en otras regiones en conflicto, la población local es la más afectada. En la Ruta del Naya, así como en el Cañón del Micay en el Cauca, las comunidades quedan atrapadas en medio de la violencia. Las disputas territoriales entre los grupos armados dejan una estela de muerte y desplazamiento, agravando la ya precaria situación de seguridad en el suroccidente de Colombia.
Este corredor oculto del narcotráfico no solo representa un desafío para las autoridades colombianas, sino también un recordatorio de las profundas raíces del conflicto armado y la necesidad urgente de soluciones integrales que aborden tanto la seguridad como el desarrollo social en la región.