Este es el momento exacto de una de las explosiones que ocurrió en Kennedy, Bogotá

Las autoridades en Bogotá tienen los ojos puestos en la localidad de Kennedy, en donde se presentaron ataques con granadas.

Atentados con granadas en Bogotá

Entre la tarde y noche del 10 de septiembre, hubo reportes de explosiones al suroccidente de la ciudad. Hasta el momento, el saldo es de una persona fallecida y diez heridos.

El primer atentado ocurrió sobre las 6:50 p.m. en la avenida Ciudad de Cali con calle 38 Sur. Las víctimas fueron trasladadas a la Clínica del Occidente. Ocho civiles y dos uniformados de la Policía resultaron heridos por la explosión.

Una de las personas afectadas es una mujer que está en la Unidad de Cuidados Intensivos. A ella le cayó una esquirla, la cual le hizo perder su ojo derecho. La segunda explosión ocurrió a las pocas horas, concretamente a las 10:50 p.m. en El Amparo. En esta, la persona que habría lanzado el artefacto murió.

Noticias RCN conoció un video con el momento exacto de la primera explosión. El material audiovisual muestra a un hombre de camisa azul que se acerca al lugar y se queda detrás de un poste por varios minutos.

A los pocos segundos, ocurrió la explosión. El video está en poder de la Policía y una pieza clave para la investigación que adelantan las autoridades. Se estudia la posibilidad que aquel sujeto habría tenido relación con el hecho.

Inseguridad en Kennedy

Ambos atentados, según informaron las autoridades, habrían sido orquestados como respuesta de las bandas criminales que operan en el sector. En el último tiempo, la Policía ha redoblado esfuerzos para dar con la captura de los principales criminales que atemorizan a la población en Kennedy.

Los habitantes del sector están cansados de la inseguridad que se vive, principalmente los comerciantes. Uno de ellos conversó con Noticias RCN y contó que cada día crecen las extorsiones.

“Los ladrones y los extorsionistas nos dicen que si uno no vende vicio en el negocio, nos pueden poner una bomba o cerrarnos”, mencionó el comerciante, quien dijo que ya son varios los comercios que dejaron de operar por las constantes amenazas.

La situación empeora aún más. Luis (el comerciante) explicó que los habitantes no quieren denunciar, por el miedo que generan las represalias que las bandas pueden tomar contra ellos. Las extorsiones se pueden convertir en homicidios.