El camerino del Junior se convirtió en un refugio para hinchas heridos tras enfrentamiento: video
Hinchas del Junior fueron atendidos en el camerino tras un violento enfrentamiento con seguidores de Atlético Nacional.
Noticias RCN
07:48 a. m.
La pasión por el fútbol en Colombia se tornó en tragedia el pasado jueves 26 de septiembre.
Desafortunadamente para el balompié colombiano, el estadio Atanasio Girardot se convirtió en escenario de enfrentamientos violentos entre hinchas de Atlético Nacional y Junior de Barranquilla.
Este episodio lamentable no solo empañó el espectáculo deportivo, sino que también dejó a varios aficionados con heridas graves.
¿Qué llevó a la confrontación entre las barras de Atlético Nacional y Junior?
Un grupo de aproximadamente 300 hinchas del Junior se enfrentó a los seguidores del equipo local, creando un ambiente de caos en las tribunas.
En medio de esta confrontación, las autoridades decidieron suspender el partido en los primeros minutos de la segunda mitad, cuando Atlético Nacional lideraba 2-0 en el marcador. La decisión fue una medida necesaria ante la falta de garantías para los asistentes y los jugadores.
Los futbolistas del Junior, al percatarse de la gravedad de la situación, intervinieron para ayudar a los hinchas que habían resultado heridos. Muchos fueron llevados al túnel de acceso donde la Cruz Roja se encontraba preparada para brindar atención médica.
La atmósfera de tensión se intensificó cuando varios reporteros que cubrían el evento se vieron obligados a buscar refugio debido a la violencia que se desataba en el estadio.
Violencia en el estadio Atanasio Girardot entre hinchas de Junior y Atlético Nacional
El saldo de este violento enfrentamiento incluyó a varios hinchas de Atlético Nacional y Junior con lesiones significativas, algunos de ellos apuñalados.
Los jugadores del equipo ‘tiburón’ se convirtieron en héroes momentáneos al ayudar a evacuar a varios aficionados gravemente heridos para recibir atención médica de inmediato. Además, se reportaron caídas de personas desde la tribuna superior a la inferior, aumentando el nivel de caos.
Este incidente subraya una preocupante realidad en el fútbol colombiano, donde la rivalidad entre barras ha derivado en episodios de violencia que amenazan la seguridad de los asistentes. Es imperativo que tanto las autoridades como los clubes implementen medidas más efectivas para prevenir que estas situaciones se repitan, asegurando un entorno seguro para todos los que aman el fútbol.