Con boletas gratis, Medellín no llenó ni la mitad del Atanasio en debut de la Liga
Los hinchas de Independiente Medellín mostraron su descontento tras perder la final frente a Santa Fe en el Atanasio.
Noticias RCN
03:43 p. m.
Independiente Medellín volvió a competir en la Liga Colombiana tras la dolorosa derrota sufrida en la final pasada frente a Santa Fe. El encuentro ante Alianza FC, disputado este domingo en el estadio Atanasio Girardot, marcó el inicio de una nueva etapa para el conjunto antioqueño, pero el ambiente distó mucho de ser el habitual para un debut de temporada. Lejos de mostrar respaldo masivo, la afición reflejó su desencanto con una asistencia muy por debajo de lo esperado.
La dirigencia del DIM intentó apaciguar el golpe reciente con una estrategia de fidelización que consistía en permitir el ingreso gratuito a todos los hinchas que demostraran haber asistido a la final anterior. Sin embargo, la respuesta fue tibia. Solo 14.064 personas acudieron al Atanasio, según cifras oficiales, una cifra baja teniendo en cuenta el contexto de reactivación y las facilidades brindadas.
Sanciones y desilusión: una mezcla que enfrió al hincha
A la baja asistencia también se sumaron restricciones en varias tribunas como consecuencia de los desmanes ocurridos en la final frente a Santa Fe. Las sanciones impidieron el acceso total al estadio, pero incluso con esta limitación, quedó claro que el vínculo emocional entre el equipo y sus seguidores está golpeado. La decepción por haber dejado escapar un nuevo título en casa todavía pesa y se hizo sentir en el silencio de las gradas semivacías.
Durante el partido, la tensión fue constante. Si bien el equipo mostró momentos de intensidad, el empate 1-1 dejó un sabor agridulce. El resultado refleja tanto el estado anímico del plantel como la falta de confianza que perciben desde la tribuna. La hinchada, exigente y apasionada, parece necesitar más que palabras y promociones para volver a creer.
Un semestre que inicia cuesta arriba
El desafío del Medellín no será únicamente deportivo. Reconstruir el lazo con la afición será igual de fundamental que sumar puntos en la tabla. El Atanasio Girardot, que tantas veces ha sido fortaleza, esta vez lució como un espejo del presente: fracturado, dolido y con la esperanza aún en pausa. El camino apenas comienza, pero el margen de error parece más estrecho que nunca.