Messi y la derrota en su primer partido del Mundial: entre sonrisas, seriedad y valentía

Lionel Messi durante el partido entre Arabia Saudita y Argentina. / Foto: AFP

Así se comportó el capitán de la selección de Argentina en su debut en Catar 2022. De la genialidad a las cosas inexplicables de la pelota.


Sebastián Arenas ENVIADO ESPECIAL CATAR

nov 22 de 2022
08:09 a. m.

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Los brazos arriba y las palmas sonando. Y un grito que se multiplicó por la acústica del estadio Lusail, a donde ingresaron más de 80 mil personas. Más de la mitad, hinchas de Arabia Saudita, país que queda al lado de Catar. Sus gritos no cesaron y sus abucheos al rival, tampoco. Los simpatizantes argentinos, siempre eufóricos y pasionales, también exigieron sus gargantas y todavía no creen que es cierta la derrota.

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Los de camiseta verde, en el segundo tiempo, le gritaban “uuuuuhhhh” a un Lionel Messi que en el primero fue protagonista y que lideró el juego de Argentina, que comenzó ganando con un tanto suyo de penalti. Una selección albiceleste que pudo irse con más ventaja al vestuario, pero apareció la polémica tecnología en el fútbol. Esa que dice que un jugador saca ventaja porque tiene un hombro por delante de la línea.

El “10” llegó sonriente al escenario. Salió a calentar feliz. A hacer lo que más ama: acariciar el sagrado objeto redondo con su pierna izquierda. Se fue a ponerse el uniforme y salió con la banda de capitán en su brazo izquierdo. Y comenzó su exhibición del primer tiempo. Se movió entre las líneas rivales, tiró caños, gambeteó, demostró que su creatividad es superior a la del resto, y creó opciones de gol.

La zurda de uno de los mejores jugadores de la historia volvió a brillar. Ese borde interno especial puso pases que solo su mente visualiza. Pero en la etapa complementaria el rápido gol catarí fue un susto del que Argentina no se pudo reponer. Además, porque el susto aumentó con el segundo tanto y la incredulidad en Lusail fue colectiva. Positiva para los árabes y desesperante para los suramericanos.

Messi, en la etapa complementaria, fue valiente. Porque valiente no es pegarle patadas al rival. Es pedir la pelota en los momentos de crisis. Y la pidió e intentó superar la defensa de Arabia Saudita con la apertura de cancha que generaron sus pases y los balones filtrados que puso. Y el equipo de Scaloni lo pudo empatar. De hecho, con un cabezazo del rosarino. Pero el portero evitó los acercamientos albicelestes.

Y Argentina perdió su primer partido del Mundial y Lionel Andrés Messi Cuccittini salió ahora con seriedad. No hubo más invicto. Justo se acabó en la Copa del Mundo. Y el “10” ahora se enfocará en derrotar a México y Polonia y continuar con el sueño. Pasó de la sonrisa a la seriedad, demostró que su zurda y su mente son únicas y que, aunque sea valiente en las difíciles, a veces los resultados no aparecen. Ya le ha pasado, porque el deporte más popular del mundo tiene eso. Es maravilloso, y cruel.

Por: @SebasArenas10

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