¿Qué pasó con la bandera que se robaron los hinchas de Junior a Atlético Nacional? Video tensionante
El partido entre Atlético Nacional y Junior se convirtió en un campo de batalla, provocando heridas en hinchas por el robo de una bandera.
Noticias RCN
02:38 p. m.
Una fuerte pelea se desató en el estadio Atanasio Girardot entre hinchas de Junior y Atlético Nacional, dejando varios heridos y una bandera robada que ha acaparado la atención de los aficionados.
A medida que se conocen más detalles, la polémica sigue en aumento.
¿Qué ocurrió durante el enfrentamiento entre hinchas de Junior y Nacional?
El conflicto tuvo lugar tras el segundo gol de Marino Hinestroza, que puso a Nacional en ventaja 2-0. La ira de los hinchas barranquilleros estalló en las gradas, en medio de una atmósfera cargada de rivalidad.
La causa aparente del altercado fue el robo de un trapo de los aficionados de Junior, que se volvió el foco del enfrentamiento. La situación escaló rápidamente, resultando en un saldo de 25 hinchas y un policía heridos, según informes oficiales de la Secretaría de Gobierno de Medellín.
¿Qué pasó con la bandera robada de Atlético Nacional?
Las redes sociales se convirtieron en el escenario donde se compartieron las noticias sobre la recuperación de la bandera robada.
Aficionados de Atlético Nacional informaron que la bandera, conocida como "Mi vida, mi alegría", fue recuperada después del tumulto.
En un trino, un hincha afirmó: “Ayer hicimos el inventario en el Atanasio y tenemos todos los trapos en casa. El que habían quitado se recuperó. Sintieron la presión y quedaron arrumados como ratas”.
La situación resalta no solo la rivalidad entre las hinchadas, sino también el comportamiento violento que puede surgir en estos contextos. La recuperación de la bandera se ha convertido en un símbolo de orgullo para los seguidores de Nacional, mientras que la tensión entre ambas aficiones continúa latente.
Con el cierre del incidente, las autoridades locales están evaluando cómo prevenir futuros conflictos y asegurar que los eventos deportivos se desarrollen en un ambiente de respeto y camaradería, evitando que actos como estos empañen la pasión del fútbol.
La comunidad deportiva espera que este episodio sirva como lección y que la rivalidad se mantenga dentro de los límites del juego.