Robinho sorprende al mundo: ahora dirige a un equipo de fútbol desde la cárcel
Robinho, condenado a nueve años de prisión en Brasil, sorprendió al mundo al asumir un inesperado rol como director técnico de un equipo de fútbol dentro de la cárcel.
Noticias RCN
06:35 p. m.
El exfutbolista brasileño Robinho, recordado por su paso en el Real Madrid, AC Milan y la Selección de Brasil, sigue cumpliendo una condena de nueve años en una cárcel de São Paulo por violación colectiva.
Aunque la defensa ha intentado en repetidas ocasiones revertir su encarcelamiento, la Corte Suprema de Brasil ratificó la sentencia, descartando el recurso más reciente.
El delito, ocurrido en 2013 en Milán, involucró a una joven albanesa que celebraba su cumpleaños número 23. Desde entonces, el caso tuvo repercusión internacional y terminó con el exdelantero tras las rejas en su país, debido a que la Constitución brasileña impide la extradición de sus ciudadanos.
Robinho, entrenador en la cárcel
Mientras cumple su condena, Robinho ha sorprendido con un nuevo rol, pues se convirtió en director técnico dentro de la penitenciaría.
De acuerdo con un libro publicado recientemente y difundido por CNN Brasil, el exjugador dirige al equipo de reclusos llamado “Tremembé Esporte Clube”, nombre de la prisión donde se encuentra recluido.
El periodista autor de la obra relata que Robinho es tratado como una celebridad entre los internos, quienes lo admiran por su pasado en el fútbol profesional. Además, dirige partidos peculiares en los que, según el testimonio, se enfrentan equipos formados con base en los delitos cometidos, como “asesinos contra violadores”.
Una dinámica que, en palabras del cronista, “llega al absurdo” dadas las circunstancias judiciales de los jugadores.
Más allá del fútbol en prisión
El brasileño de 41 años no solo dedica su tiempo al deporte. Según el mismo relato, también participa en actividades como el cuidado de un huerto, la integración en un club de lectura y hasta la capacitación en tecnología para reparar televisores y radios.
Incluso se le atribuye la intención de proyectar un emprendimiento en apuestas deportivas cuando recupere su libertad.
Aunque Robinho insiste en su inocencia y sostiene que la relación fue consensuada, lo cierto es que la justicia brasileña e italiana lo mantienen tras las rejas, ahora con un inesperado rol como entrenador dentro de la cárcel.