Vehículos que se verían afectados con la propuesta de eliminar el subsidio al ACPM

El Gobierno Nacional de Colombia ha puesto sobre la mesa una propuesta que busca eliminar el subsidio al Aceite Combustible para Motores (ACPM), también conocido como diésel, una medida que, de aprobarse, impactaría directamente a un segmento específico del parque automotor en el país.

La propuesta, que se formalizará a través de una modificación al Decreto 1068 de 2015 y estará disponible para comentarios del público hasta el 2 de agosto, tiene como principal objetivo corregir una distorsión en el mercado de combustibles y aliviar la carga fiscal del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FEPC).

Se estima que esta medida generaría un ahorro fiscal cercano a los $386.000 millones anuales.

¿Qué vehículos se verían afectados con esta propuesta?

El Ministerio de Minas y Energía y el Ministerio de Hacienda han aclarado que la eliminación del subsidio estará focalizada en vehículos particulares, oficiales y diplomáticos, específicamente automóviles, camionetas, camperos y cuatrimotos.

Según el ministro de Minas y Energía, Edwin Palma Egea, la decisión busca desincentivar el uso de combustibles fósiles altamente contaminantes y promover una transición energética más justa, además de corregir lo que se considera un subsidio regresivo.

"No tiene ningún sentido que el Presupuesto General de la Nación, que es el dinero del pueblo, de la gente más pobre, se utilice para subsidiar camionetas de cuatro puertas y vehículos lujosos", afirmó el ministro.

En este sentido, la medida se centrará en aquellos vehículos diésel que, aunque forman parte del parque automotor nacional, no están directamente vinculados a actividades productivas esenciales o al transporte masivo.

Se habla de aproximadamente 360.000 camionetas de lujo que utilizan este combustible y que, según el Gobierno, no contribuyen de manera significativa al desarrollo económico del país en comparación con otros sectores. Estos vehículos dejarían de recibir la estabilización de precios que otorga el FEPC, lo que significaría que el valor del galón de ACPM para ellos se alinearía con el precio de paridad internacional.

La eliminación del subsidio se implementaría de forma gradual, comenzando en las principales ciudades y áreas metropolitanas del país, como Bogotá, Medellín, Cali, Barranquilla y Bucaramanga.

¿Qué pasará con el transporte público y de carga?

Una de las principales preocupaciones que surge con cualquier modificación en el precio del ACPM es el impacto en el transporte de carga y de pasajeros, sectores que son pilares fundamentales de la economía y que podrían trasladar el aumento de costos al consumidor final, generando inflación. Sin embargo, el Gobierno ha sido enfático en asegurar que esta medida no afectará a los transportadores de carga ni al transporte público.

El ministro de Hacienda, Germán Ávila Plaza, ha reiterado que existen acuerdos firmados con el sector transportador para mantener estable el precio del ACPM para ellos. La diferenciación busca priorizar a los sectores que contribuyen directamente a la economía y al bienestar social, evitando que el costo del diésel subsidiado siga siendo una carga para las finanzas públicas en beneficio de vehículos de uso particular y suntuoso.

El déficit del diésel en el FEPC, que aún supera los $8 billones, es un factor clave detrás de esta decisión.