17 presos fueron asesinados por disputa entre bandas narcotraficantes en cárcel de Ecuador: algunos fueron decapitados
Desde temprano, familiares de los reclusos se acercaron al penal para preguntar si sus seres queridos se encontraban entre las víctimas.
Noticias RCN
07:09 p. m.
Una nueva tragedia carcelaria se registró en la madrugada del jueves, 25 de septiembre, en la cárcel de la ciudad de Esmeraldas (Ecuador), cerca de la frontera con Colombia.
Imágenes aterradoras de los 17 presos, muertos durante un enfrentamiento entre bandas narcotraficantes, han estado circulando en redes sociales.
En ellas, se ven partes de cuerpos regadas por el penal, torsos ensangrentados y personas decapitadas, tras una noche de desordenes que, en un principio, parecían imposibles de controlar.
Al menos 30 personas han muerto por enfrentamientos en cárceles los últimos días:
Este episodio, sin embargo, no es el primero de la semana que enluta a las familias de personas privadas de la libertad, que representa un reto para el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores de Ecuador (Snai).
Apenas, el lunes, otro enfrentamiento en la penitenciaria de Machala dejó 14 personas muertas, entre ellas un guardia, y otras 14 heridas.
En lo que va de la semana, al menos 30 presos han perdido la vida en enfrentamientos, que se han convertido en un problema constante para el Snai desde el 2021.
En los últimos años, las masacres al interior de centros penitenciarios han cobrado la vida de 500 ecuatorianos, que, tras las rejas, siguen disputándose el control de las rutas del narcotráfico en Ecuador, por las que se transporta el 70% de las drogas que van hacia Europa y los Estados Unidos.
La tragedia de la prisión de Esmeraldas tiene en vilo a las familias de los reclusos:
Un habitante del sector, dijo a la agencia AFP había “mujeres que desde las cinco y media (de la mañana) se botaron a las calles para preguntar por sus familiares".
Vecinos del sector les informaron sobre “la balacera”, los gritos y lamentos que se escucharon durante gran parte de la madrugada.
Sin embargo, la respuesta que recibieron de parte de las autoridades se limitó a una recomendación vaga para visitar la morgue de la ciudad y preguntar por el nombre de sus seres queridos.