Avanza la recuperación de Benedicto XVI por su enfermedad en el rostro
Si bien el herpes zóster que padece el papa emérito Benedicto XVI no es mortal, sí se ha vuelto muy doloroso y penoso para el exlíder de la Iglesia Católica en el mundo.
Noticias RCN
11:03 p. m.
Fuentes vaticanas confirmaron que avanza con eficacia el proceso de recuperación de una dolorosa enfermedad que padece actualmente el papa emérito Benedicto XVI.
Según Georg Gänswein, obispo secretario del pontífice retirado, “la enfermedad está disminuyendo”, refiriéndose al herpes zóster que atacó la cara del religioso alemán.
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En declaraciones al medio alemán Südkurier, el obispo narró que las dolencias del papa emérito comenzaron días después de la muerte de su hermano, el también religioso George Ratzinger, quien falleció el mes pasado en su país natal.
El secretario señaló que, si bien la enfermedad que padece Benedicto XVI no es mortal, sí se ha vuelto muy dolorosa y penosa para el ex líder de la Iglesia Católica en el mundo.
"Tuvo dolores que no le desearía ni al peor enemigo", comentó el secretario de Ratzinger.
Actualmente el papa emérito tiene 93 años, y es recordado por ser el primer prelado en dimitir a su cargo; el máximo existente en la jerarquía clerical del catolicismo, en más de 600 años de historia reciente.
Las razones que adujo en su momento el llamado “representante de San Pedro”, estaban relacionadas con dolencias de salud que le impedían el cabal desarrollo de sus labores papales.
Luego de su retiro en 2103, el pontífice emérito se encuentra confinado en una residencia ubicada al interior de un monasterio en el Vaticano el primer pontífice en dimitir en cerca de 600 años alegando razones de salud, lleva una vida retirada en un pequeño monasterio del Vaticano.
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La suerte de salpullido facial atacó a Ratzinger pocos días después de su regreso al Vaticano, tras su viaje a Alemania para visitar y despedirse de su hermano.
Ese viaje a su vez, representó el primer y único viaje del pontífice emérito tras su renuncia al papado en 2013.