¿Cuánto cuestan las históricas joyas robadas del museo del Louvre?
Nueve joyas históricas del siglo XIX fueron el botín de un cinematográfico robo ocurrido en la galería Apolo del Louvre el pasado domingo.
AFP
05:24 p. m.
El museo del Louvre en París, el más visitado del mundo, fue blanco de un cinematográfico robo el pasado 19 de octubre, cuando ladrones encapuchados ingresaron por una ventana para robar nueve joyas históricas del siglo XIX, entre ellas la corona de la emperatriz Eugenia, esposa de Napoleón III.
Entre las piezas, que atravesaron dos siglos de historia y fueron propiedad de importantes soberanas y emperatrices de Francia, se encontraba la corona de la emperatriz Eugenia, esposa de Napoleón III, la cual fue abandonada por los ladrones durante su huida.
El resto siguen en poder de los delincuentes, a quienes las autoridades francesas buscan por cielo y tierra.
¿Cuáles fueron las piezas robadas en el Louvre?
Una de las joyas más valiosas es la diadema de perlas de Eugenia, realizada por el famoso joyero Alexandre-Gabriel Lemonnier poco después de la boda de la emperatriz de origen español con Napoleón III, en 1853.
En el botín se encuentran, además, el collar y los pendientes de zafiros que fueron usados por la reina María Amelia (esposa de Luis Felipe I, rey de Francia de 1830 a 1848) y la reina Hortensia (madre de Napoleón III).
El collar y los pendientes de esmeraldas fueron un regalo de boda de Napoleón I a su segunda esposa, la emperatriz María Luisa, realizados por su joyero oficial, François-Régnault Nitot.
En la lista se encuentran el relicario de la emperatriz Eugenia, montado en 1855 por Bapst con 94 diamantes; y la tiara que también perteneció a la emperatriz Eugenia, que cuenta con casi 2.000 diamantes y más de 200 perlas. El collar de zafiros está compuesto por ocho piedras preciosas de color azul noche y 631 diamantes, y el collar de esmeraldas tiene 32 esmeraldas y 1.138 diamantes, según indica el Louvre en su página web.
El millonario valor de las joyas del Louvre
Realizadas por los grandes joyeros de la época, como Nitot, Lemonnier o Paul-Alfred Bapst, estas joyas combinan diamantes, perlas y piedras preciosas para crear composiciones espectaculares.
De acuerdo con la curadora Laure Beccuau, las joyas robadas tienen un valor estimado de 88 millones de euros, equivalente a unos 102 millones de dólares.
A esta alta suma de dinero se suman los daños históricos, calificados por los conocedores como los más graves.
La fiscal encargada del caso dijo que los delincuentes obtuvieron el vehículo montacargas que sirvió para perpetrar el robo a través de "un seudoalquiler para un supuesto trasteo".
Según ella, además de los magistrados de la Jurisdicción interregional especializada (Jirs) de la fiscalía de París que dirigen las investigaciones, hay "un centenar" de investigadores movilizados en la capital francesa en este caso.
La dirección del Louvre defendió la calidad de las vitrinas donde se encontraban las joyas robadas, en respuesta a un artículo publicado por un periódico satírico francés que asegura que eran "aparentemente más frágiles que las antiguas".
El grupo de ladrones solo necesitó unos minutos para entrar en la galería de Apolo gracias al montacargas exterior, romper con una sierra radial varias vitrinas instaladas en 2019, y llevarse nueve joyas. Luego, en su huida, abandonaron una de las piezas.