Estados Unidos cambia de manera drástica las reglas en aeropuertos para 2025: conozca todos los detalles

EE. UU. implementará cambios significativos en la seguridad aeroportuaria a partir de 2025, transformando la experiencia de viaje para millones de pasajeros. Las nuevas reglas, anunciadas por la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA), buscan modernizar los controles, agilizar los procesos y, al mismo tiempo, mantener los más altos estándares de seguridad frente a amenazas en constante evolución.

La iniciativa, que se desplegará progresivamente a lo largo del año, introduce nuevas tecnologías de escaneo, requisitos actualizados para la documentación y una serie de beneficios para los viajeros que cumplan con los nuevos protocolos.

Estos son los principales cambios que habrá en aeropuertos de EE.UU.

Uno de los cambios más notables es la implementación de la "seguridad inteligente" a través del uso de tecnología de imágenes 3D de alta definición en todos los puntos de control. Estos nuevos escáneres, conocidos como Tomografía Computarizada (CT), permitirán a los agentes de la TSA inspeccionar el contenido de las maletas de mano sin necesidad de que los pasajeros retiren líquidos, aerosoles o dispositivos electrónicos.

Esta medida representa un alivio significativo para los viajeros, que a menudo se ven obligados a desempacar y reempacar sus pertenencias en el control de seguridad, lo que contribuye a las largas filas y a la frustración. La tecnología CT crea una imagen tridimensional detallada del equipaje, permitiendo a los oficiales rotar la imagen y detectar de manera más precisa cualquier artículo prohibido, mejorando la eficiencia y la seguridad.

Además de la tecnología de escaneo, la TSA también está implementando un sistema de verificación de identidad biométrica en puntos de control selectos. Los pasajeros que se hayan inscrito previamente en programas como TSA PreCheck o Global Entry podrán optar por utilizar sus huellas dactilares o escaneo facial para confirmar su identidad, eliminando la necesidad de presentar una tarjeta de embarque física o una identificación.

Este proceso no solo agilizará el control, sino que también mejorará la precisión de la verificación de identidad. La expansión de esta tecnología de autenticación sin contacto se considera un paso crucial hacia una experiencia de viaje más fluida y eficiente, reduciendo el contacto físico y minimizando los tiempos de espera.

Para los viajeros internacionales, los cambios también afectarán la forma en que se verifica su documentación. A partir de 2025, se requerirá que todos los pasaportes extranjeros contengan un chip RFID (Identificación por Radiofrecuencia) para poder ser leídos por los nuevos sistemas de escaneo.

Los países que no emitan pasaportes con esta tecnología deberán actualizar sus documentos o, en su defecto, sus ciudadanos podrían enfrentar demoras adicionales en los aeropuertos estadounidenses. Este requisito tiene como objetivo estandarizar la verificación de identidad a nivel global y acelerar los procesos de entrada al país, reduciendo la posibilidad de fraude documental.

La TSA enfatiza que el objetivo principal de estos cambios es equilibrar la seguridad con la comodidad del pasajero. "Estas mejoras no son solo para la seguridad", declaró un portavoz de la TSA en una conferencia de prensa. "Son una inversión en la experiencia del viajero, diseñadas para hacer que el proceso sea más rápido y menos estresante, sin comprometer nuestra misión fundamental.