El extraño caso de Natacha, la turista belga desaparecida hace cerca de un mes en Perú

Se cumplen 23 días desde que se reportara, la extraña desaparición de Natacha de Crombrugghe, una turista de 28 años de quien se perdió el rastro cuando visitaba el llamado valle de Colca, en Arequipa, Perú, despertando las alarmas de los habitantes de esa región, y obligando a que autoridades, locales y belgas, aúnen esfuerzos en su búsqueda. 

Según recogen medios locales, el último rastro de la turista belga se refiere al testimonio de la propietaria de un hostal donde se estaba hospedando, y las grabaciones de una cámara de seguridad que la captaron buscando un lugar para alejarse en los días previos a su desaparición.

De acuerdo con las declaraciones de la dueña del hostal, un pequeño lugar llamado La Estancia en la zona de Cabanaconde, la joven habría salido, advirtiendo que iba a realizar una caminata exploratoria por el sector de Sangay, añadiendo que volvería en cinco días; no obstante, nunca volvió. 

La primera hipótesis de la desaparición:

Dentro de la investigación que adelantan las autoridades, y con el ánimo de descartar hipótesis relacionadas con un asesinato al interior del hostal, se desarrolló una prueba de ‘luminol’, con la que se desestimó la existencia de rastros de sangre en el lugar.

Sobre el particular, en declaraciones recogidas por medios peruanos, la dueña del hostal, Gladys López, advirtió que ella no tenía nada que ocultar, y explicó que su negocio es un emprendimiento familiar. 

Después de ello, la investigación se ha centrado en la búsqueda por los senderos que supuestamente habría de visitar la turista. 

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Policía de Perú no busca sola a Natacha:

Tras los primeros días de infructuosa búsqueda, a Perú arribaron, procedentes de Bélgica Eric de Crombrugghe, barón de Linkebeek, padre de la desaparecida, y la madre, una reconocida escritora belga identificada como Sabine Verhest.

Los padres de Natacha llegaron para apoyar la búsqueda, pues, durante el recorrido de las autoridades también se habían ubicado algunos elementos que necesitan ser identificados para saber si serían pistas o no del rastro de la desaparecida. 

De igual modo, desde las autoridades peruanas, se adelantan labores de coordinación con sus pares en Bélgica, con el objetivo de poder rastrear el recorrido de la mujer, a través de la identificación de los datos de su GPS.

Además, en el ejercicio de su deber de velar por el bienestar de sus connacionales en territorio peruano, el embajador de Bélgica en el país se desplazó hasta la zona donde fue vista por última vez la mujer.

En su arribo a Arequipa, ocurrido el pasado 14 de febrero, Mark Van de Vreken, embajador de Bélgica en Lima, aportó un dron, con el objetivo de que la búsqueda de la mujer pudiese ser reforzada desde las alturas, debido a la complejidad propia del terreno, y al a posibilidad de que, en una caminata, la mujer hubiese podido resbalar y caer en un sector intransitado. 

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Hallazgos que resultaron ser falsas esperanzas: 

Dentro de los hallazgos que ha logrado la policía peruana al peinar el territorio y las posibles rutas emprendidas por la mujer, han encontrado diversos elementos que, gracias al cotejo con sus padres, han logrado ser descartados. 

Una de las pistas que logró ser descartada fue el encuentro de un zapato de trekking y un guante; ambos de mujer, que finalmente terminaron por ser desestimados porque sus padres afirmaron que eran de una talla inferior a la de la mujer. 

De igual modo, otra de las pistas que terminó por ser descartada, fue el hallazgo de una prenda intima femenina de color negro, encontrada en un terreno rural sobre una piedra, a la que se le debió practicar pruebas para descartar que perteneciera a la mujer desaparecida.

Otros ejes de la búsqueda: 

Dentro de las hipótesis que aún manejan las autoridades de ese país, se encuentra que la mujer se hubiera buscado refugiar al interior de una cueva para protegerse de animales salvajes, y posteriormente no hubiese podido retomar su curso.

Desde las autoridades también se advierte que la búsqueda se ha visto truncada porque, debido a la elevada cantidad de eventos de lluvia presentados en el último mes, eventuales huellas que hubiese podido dejar la mujer, que permitieran ser rastreada, se podrían haber borrado. 

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Una ayuda poco usual: 

Además de los esfuerzos desplegados en la zona por parte de los cuerpos de búsqueda y rescate, en los que se han desplegado decenas de uniformados, y sumado al apoyo del dron suministrado por la Embajada belga, en sintonía con las creencias y las tradiciones de los pueblos locales, la búsqueda fue reforzada con la adhesión al equipo de búsqueda de espiritista reconocido en ese país, identificado como Eloy Cacya.

Pese a lo curioso del caso, esta no es la primera vez que los cuerpos de búsqueda buscan el apoyo de este líder, y los medios locales destacan como en el pasado, el apoyo de este personaje ha resultado benigno en los procesos de búsqueda. 

Según recogen medios de Perú, Cacya ayudó a la ubicación de un joven desaparecido en el cerro de la Bomboya, identificado como Ciro Castillo, en 2011.  

En los mensajes difundidos tras confirmase su desaparición, se advertía que la mujer viajaba sola por Perú.

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