"El mayor humedal del mundo está ardiendo en llamas": el relato de los habitantes del Pantanal

Foto: AFP

El Estado brasileño aseguró que la emergencia en el Pantanal es resultado de los efectos del cambio climático, El Niño y La Niña, que han producida una sequía extrema, y las quemas para renovación de pastos o cultivos.


AFP

jun 27 de 2024
02:25 p. m.

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Tras una temporada de lluvias que provocó inundaciones devastadoras en mayo en Rio Grande do Sul, sur de Brasil, esa región y refugios ambientales como la Amazonía y el Pantanal ahora están enfrentando una "severa" sequía, según la ministra de Medio Ambiente, Marina Silva.

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La funcionario explicó que una "mezcla" de fenómenos naturales como El Niño y La Niña y la "potencialización del cambio climático" están provocando estos eventos extremos también en la Caatinga y en el sureño estado de Rio Grande do Sul, que vive el peor desastre climático en su historia.

Como consecuencia entonces, la selva amazónica y el mayor humedal tropical del mundo están sufriendo nuevos incendios, que se suman a las cifras récord de incendios forestales en Brasil.

“Brasil registró un récord de incendios forestales de enero a abril, con más de 17.000 identificados, según cifras oficiales”, señaló Silva.

El mayor humedal del mundo está ardiendo en llamas

Se trata del Pantanal brasileño, un santuario de biodiversidad en el sur de la Amazonía, que se extiende también por Bolivia y Paraguay siendo una zona que atrae cada año a millones turistas para la observación de caimanes, nutrias, aves y hasta jaguares.

Según World Wide Fund For Nature, el Pantanal es el humedal de agua dulce más grande del mundo con una superficie estimada de 340.500 kilómetros cuadrados.

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Sin embargo, también es conocido por ser foco de incendios especialmente cuando se atraviesa la temporada seca. Por ejemplo, cifras del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE), establecieron que, desde el 1 de junio, se han identificado mediante satélite 1.729 focos de incendios en esta zona.

A su vez, desde esa fecha y hasta el 20 de junio, el INPE registró 2.628 incendios en el Pantanal, presentando un aumento del 1.818% respecto al mismo periodo del año anterior.

"Es extremadamente preocupante, todo indica que estamos ante otro evento climático extremo, lo que nos hace temer por el futuro del bioma en los próximos meses ", declaró a la AFP Claudio Angelo, miembro del colectivo de oenegés Observatorio del Clima.

Hasta el momento, las llamas ya han arrasado con 627.000 hectáreas en el Pantanal desde enero.

¿Cómo viven la crisis de incendios los habitantes del Pantanal?

Erica Cristina, una residente de 44 años de la región del Pantanal, describe que desde el estallido de un gran incendio los habitantes de la zona han estado “respirando humo todos los días”. La residente quien es originaria de Río de Janeiro señaló también que el aumento de los incendios “es caótico”.

Asimismo, enfatizó en que "muchas personas han perdido sus hogares" en incendios que no cesan desde el año 2020, el cual representa el peor año registrado de incendios en la región. A su vez culpó a estos fenómenos de ser los "causales de problemas de salud, especialmente problemas respiratorios".

Ante la crisis de salud, Naldinei Iván Ojeda, un soldado retirado de 53 años, también habitante del sector, está considerando abandonar su ciudad natal debido a los problemas respiratorios que él y su hijo de 15 años han experimentado. Culpa directamente a las personas que inician los incendios, en lugar de las condiciones secas que los agravan.

"No hay incendios accidentales en el Pantanal. Nunca he visto un incendio de la nada aquí. Todos los años, es lo mismo", concluyó.

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Por otra parte, Bruno Bellan, otro afectado por la sequía, mencionó que la preocupación crece constantemente, pues a pesar de que aún no están en la estación seca del año, los incendios están alcanzando récords.

"Los fuertes vientos, el fuego y el calor suelen comenzar en agosto", pero "no ha llovido en la región durante 50 días", explicó Bruno.

Bellan, que tiene 900 cabezas de ganado en su granja familiar en Mato Grosso do Sul, está preocupado por un incendio que está a dos kilómetros de su propiedad, al que los bomberos han tenido dificultades para acceder.

"Nos preocupa que el fuego entre en la granja y cause destrucción. El ganado tiene miedo y podría perderse en las llamas", expresó.

Por estas situaciones, los bomberos en el área continúan trabajando para sofocar la tierra humeante que está carbonizada, pues según una experta, para evitar que el fuego en Brasil se propague se debe “movilizar la Policía Federal, los bomberos, el Ejército y los medios legales que se tienen en el país para inhibir estas situaciones.

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