Las cucarachas picantes, todo un manjar en la China
Es una escena digna de una película de horror: en un criadero del sudoeste de China, 10 millones de cucarachas de bandas marrones bullen en la oscuridad. Acabarán como manjar.
Noticias RCN
01:20 p. m.
Li Bingcai, agricultor de la provincia de Sichuan, cuida a sus criaturas de seis patas. Las alimenta a diario y viven en placas de madera verticales, desde donde emiten en coro un sonido estridente.
En este espacio, Li acaba cubierto de insectos, que llegan hasta sus mejillas. Él no parece intimidado. Ni él ni otros criadores que decidieron probar suerte en esta actividad.
Venden las cucarachas a la industria farmacéutica tradicional para la elaboración de medicamentos. Pero Li Bingcai también las cría para el paladar. Junto a su granja, varios restaurantes las sirven salteadas con pimiento, una especialidad de Sichuan, a gourmets. Mañana habrá cucaracha laqueada.
"A la gente le cuesta imaginarse lo delicioso que está. Hasta que prueba", explica el criador. Él se lleva un insecto vivo a la boca, lo mastica y se lo traga.
La cucaracha americana (Periplaneta americana) es una de las variedades más extendida. La consumen por sus supuestas propiedades contra las úlceras y los problemas respiratorios, o como simple vigorizante.
"Estos bichos tienen un sistema inmunitario muy desarrollado. Las personas pueden obtener beneficios si los consumen", asegura Li Bingcai.
Su granja se encuentra en una casa antigua rodeada de campos en Yibin, una región montañosa cubierta de bosques de bambúes. La sala dedicada a la cría, del tamaño de un terreno de bádminton, tiene ventanas con una rejilla para prevenir la fuga de los intentos.
Las cucarachas tienen propiedades depurativas y diuréticas, afirma Liu Daoyuan, profesor del centro médico Yongshou, en Yinchuan (norte). "También es eficaz para aliviar los dolores de garganta, las anginas o las cirrosis hepáticas", afirma.
Otros expertos de medicina china recalcan que la cría de cucarachas no está regulada por normas estrictas, lo que posibilita efectos indeseables.
Li Bingcai sueña con convencer a sus contemporáneos de que coman cucarachas. Para ello colabora con un restaurante local.
Llegan habitantes de la región para probar los insectos, atraídos por la publicidad positiva en torno a sus supuestos beneficios, explica el jefe del establecimiento, Fu Youqiang. Cocina hasta 30 platos de cucarachas por mes.
Un cliente, Luo Gaoyu, las prueba. La cucaracha salteada es "más bién sabrosa, con aroma y muy crujiente". "Creo que todo lo que es bueno para la salud debería comerse. Poco importa qué. Su valor nutritivo es alto y contienen muchas proteínas".
Li Bingcai prevé crear una gama de productos, con pomadas de extractos de cucaracha, parches médicos y suelas a base de cucaracha en polvo que, según él, son muy cómodas.
Hay tantas cosas buenas en este insecto. ¡La gente lo tiene que saber!", insiste. "Muchos piensan que es un insecto dañino pero para mí es como el oro. Son como mis hijos.
NoticiasRCN.com/ AFP