Misión de la ONU denuncia historial de crímenes de lesa humanidad en Venezuela
El informe expuso detenciones arbitrarias, tortura, violencia sexual y desapariciones forzadas como parte de un patrón de represión sistemática.
Noticias RCN
11:52 a. m.
La Misión Internacional Independiente de Determinación de los Hechos de las Naciones Unidas sobre Venezuela ha presentado un nuevo informe que documenta un preocupante aumento de las violaciones de derechos humanos en el país.
El documento expone, con gran detalle, una serie de crímenes cometidos por el gobierno venezolano, las fuerzas de seguridad y grupos civiles armados progubernamentales antes, durante y después de las elecciones presidenciales de julio de 2024, marcadas por la controversia y la represión.
Estas elecciones, que fueron seguidas de masivas protestas, han desencadenado una respuesta brutal por parte del régimen, según las conclusiones del informe de la Misión.
Misión de la ONU denuncia crímenes de lesa humanidad en Venezuela
El informe, de 158 páginas, cubre el periodo comprendido entre septiembre de 2023 y agosto de 2024, detallando las acciones represivas del Estado venezolano.
La Misión ha señalado que el gobierno de Nicolás Maduro, a través de sus fuerzas de seguridad y colectivos armados progubernamentales, ha intensificado sus esfuerzos por sofocar cualquier tipo de oposición, utilizando métodos cada vez más violentos y sofisticados.
Entre las violaciones documentadas se encuentran detenciones arbitrarias, desapariciones forzadas de corta duración, tortura, y violencia sexual, prácticas que se han ejecutado de manera sistemática y que forman parte de una estrategia organizada para silenciar a quienes se oponen o son percibidos como opositores al régimen.
El informe indica que estas violaciones no se limitan a líderes políticos o activistas de alto perfil, sino que se han extendido a la población general, incluyendo niños, niñas y adolescentes, así como personas con discapacidad.
Misión de la ONU advierte violación a los derechos humanos de los menores en Venezuela
Particularmente alarmante es la situación de los niños y adolescentes detenidos durante las protestas que siguieron a las elecciones presidenciales de julio, pues el órgano documentó la detención de 158 menores, de los cuales 130 eran varones y 28 niñas.
Estos niños y adolescentes fueron acusados de delitos graves como terrorismo, y muchos de ellos fueron sometidos a tortura o amenazas para obtener confesiones forzadas, además, se asegura que a muchos de estos se les negó el acceso a abogados de su elección, dejándolos en una situación de vulnerabilidad ante un sistema judicial que opera bajo las órdenes del Ejecutivo.
La Misión de la ONU también destaca que las violaciones de derechos humanos no solo ocurrieron durante las protestas, sino que fueron parte de una campaña represiva más amplia que comenzó en octubre de 2023, cuando el gobierno activó lo que el informe describe como una “maquinaria de represión”.
Esta tenía como objetivo desarticular a la oposición política de cara a las elecciones de julio de 2024 y, tras los comicios, intensificó su violencia en un intento de desmovilizar cualquier forma de protesta o disidencia.
¿Quiénes son los principales actores de represión en Venezuela?
Uno de los elementos más perturbadores del informe es la descripción de la represión ejercida por los colectivos, grupos armados de civiles progubernamentales que actuaron en coordinación con las fuerzas de seguridad del Estado.
Estos grupos, conocidos por su lealtad al gobierno, jugaron un papel clave en la represión de las protestas, particularmente en el uso de armas de fuego para dispersar a los manifestantes.
De hecho, se señala que durante los primeros días de las protestas postelectorales, al menos 25 personas murieron, incluyendo dos menores de edad; la mayoría de estas muertes fueron causadas por disparos, y aunque en algunos casos no se ha podido identificar a los responsables, el informe de la Misión señala que en al menos ocho incidentes fatales, las fuerzas de seguridad del Estado estuvieron involucradas en el uso de armas de fuego contra los manifestantes.
Del mismo modo, se resalta la creciente militarización de la respuesta estatal a las manifestaciones, en donde las fuerzas de seguridad, incluyendo la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y la Policía Nacional Bolivariana (PNB), fueron responsables de la mayor parte de las detenciones y del uso excesivo de la fuerza para reprimir las protestas.
Esto junto con los servicios de inteligencia del Estado, como el SEBIN y la DGCIM, quienes también fueron responsables de torturas y otros tratos crueles, inhumanos o degradantes contra los detenidos.
Casos específicos de represión en Venezuela denunciados por la Misión de la ONU
Durante el periodo cubierto por el informe, la Misión investigó casos que ilustran cómo el Estado ha usado la represión para controlar y silenciar a la población. Uno de los ejemplos más significativos es la operación conocida como “Brazalete Blanco”, llevada a cabo entre diciembre de 2023 y marzo de 2024.
En esta operación, al menos 48 personas, entre civiles y militares, fueron arrestadas bajo acusaciones de conspirar contra el gobierno. Estas detenciones fueron realizadas sin el debido proceso y los detenidos fueron sometidos a tortura y amenazas para obtener confesiones.
De los 48 detenidos, 39 eran hombres y nueve eran mujeres, lo que refleja la tendencia a atacar tanto a líderes políticos como a miembros de la sociedad civil.
Finalmente, el documento de la Misión concluye que estas violaciones de derechos humanos no son incidentes aislados, sino que forman parte de un patrón sistemático de represión que ha sido implementado por el gobierno de Maduro para silenciar a la oposición.