Sin registro criminal ni problemas mentales, así era Stephen Craig Paddock

Stephen Craig Paddock, el estadounidense que mató a decenas de personas en Las Vegas, era un pensionado de 64 años que vivía junto a un tranquilo campo de golf cerca de Las Vegas, adonde le gustaba ir a apostar.

Su padre estuvo en la lista de los más buscados en los años 60’s por el robo a varios bancos. Pero él no tenía antecedentes penales, ni historial de enfermedades mentales, aseguró su familia.

Según informaron las autoridades, Paddock, se registró en el hotel casino Mandalay Bay el 28 de septiembre. Se ubicó en una habitación del piso 32 desde allí disparó contra una multitud que asistía a un concierto de música country.

Al menos 58 murieron y más de 500 resultaron heridos en lo que se considera el tiroteo más mortífero en la historia reciente de Estados Unidos.

En la habitación del hotel las autoridades los agentes hallaron por lo menos ocho armas, algunas de ellas largas.

Hasta el momento, sus motivaciones para cometer semejante masacre son un misterio para el FBI, y más aún para sus familiares, que no salen de su asombro.

"¿Dónde diablos recibió armas automáticas? No tenía antecedentes militares ni nada de eso", dijo su hermano Eric a medios locales. "Era un tipo que vivía en una casa en Mesquite, que iba y jugaba en Las Vegas".

Mesquite es una pequeña ciudad cerca del límite entre Nevada y Arizona, a unos 130 kilómetros de Las Vegas.

Según su hermano, tampoco era "un tipo ávido de usar armas". "Era apenas un tipo normal. Algo se quebró en él, algo ocurrió", afirmó.

Según la policía, Paddock no tenía antecedentes policiales ni registro de arresto. Además de contador público, tenía una licencia de piloto y poseía permiso para caza mayor, válido para el territorio de Alaska.

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