El aumento en el precio de los combustibles

El tiempo pasa y el costo de los bienes y servicios que suplen nuestras necesidades del día a día va en alza. Y es un ciclo que, para infortunio de todos, no acabará pronto. Comprar alimentos golpea cada vez más el bolsillo de los ciudadanos y lo peor del caso es que esta situación empeorará con el incremento en el precio de los combustibles que se dará de forma sostenida en los próximos meses, afectando considerablemente las finanzas de las familias colombianas. 

Desde junio de este año, iniciaron los aumentos al galón de gasolina y ACPM por montos de $ 250 pesos mensuales. Sin embargo, a partir del mes de septiembre, el incremento será gradual por la suma de $ 400 pesos hasta finalizar el año. Y es por eso que en este espacio, haré mi mejor esfuerzo por explicar el porqué una medida que parece desatinada en medio de una recuperación económica, es en realidad una decisión acertada, pues este incremento no se ha ocasionado como consecuencia directa de la inflación, sino que se trata de una orden decretada por el Gobierno Nacional. 

Para entender las razones de esta noticia es indispensable explicar que en Colombia el precio de los combustibles es subsidiado por todos los contribuyentes. Metodología introducida mediante la Ley 1151 del 2007 que creó el Fondo de Estabilización de Precios de Combustibles, FEPC, un mecanismo que tiene como objetivo evitar que nos afecte las variaciones internacionales de este tipo de commodities. ¿Cómo funciona? mediante este Fondo se le realiza un pago a los productores e importadores de combustibles por valor de la diferencia entre los precios internacionales y los precios nacionales. Así se atenúan las fluctuaciones en el mercado nacional y los ciudadanos no nos vemos expuestos aumentos desmedidos a la hora de tanquear nuestro vehículo. Y es que pocos lo saben, pero gracias al FEPC, en la actualidad somos el país con el litro de gasolina más bajo por dólar en Latinoamérica, después de Venezuela, Bolivia y Haití. 

¿Y de dónde sale el dinero que se le gira a los productores e importadores para suplir la diferencia? En teoría, el FEPC fue diseñado para ser autosostenible, pues ahorraría cuando los precios internacionales estuvieran bajos y subsidiaría el combustible cuando los precios aumentaran. Sin embargo, este principio dista mucho de la realidad pues el Fondo desde sus inicios ha tendido a ser deficitario ya que subsidia más de lo que ahorra. Solo en 2021, el déficit total ronda en los $ 11,7 billones de pesos (una cifra cercana a la reforma tibutaria de Carrasquilla) y en un acumulado de once años ha arrojado déficits por un monto cercano al 2,9 % del PIB.

Por eso, la decisión más acertada aunque no lo parezca, es aumentar el precio de la gasolina y el ACPM e ir liberando de a poco esa carga fiscal que es tomada del Presupuesto Nacional. Un anuncio sin duda impopular pues generaría repercusiones graves a la recuperación económica del país al elevar los costos de la cadena de suministro de alimentos y el de los medios de transporte masivos, solo por poner un par de ejemplos. No obstante, a pesar de dichas consecuencias, esta orden no da más espera. 

Por último, cabe mencionar que el Gobierno de Iván Duque pospuso tanto como le fue posible decretar dichos aumentos, arrojándole a la nueva administración la difícil tarea de definir el ritmo de los ajustes. A este respecto, se espera que en las próximas semanas desde el Ministerio de Minas y Energía en conjunto con el Ministerio de Hacienda, inicien con la conformación de espacios que le permitan a los gremios de los distintos sectores de la economía proyectar planes para atenuar los efectos de esta medida. Pues en este caso, no se trata de una decisión aislada que afectaría las finanzas de un grupo de personas determinado, sino que sin distinción alguna, haría para las familias colombianas que el costo de la vida les sea cada vez más difícil de mantener. 

@danielamercadom
Abogada en regulación eléctrica e hidrocarburos.