Día del Reciclaje, la acción que puede conservar nuestras fuentes hídricas
El Día del Reciclaje se celebra el 17 de mayo y en estos momentos Colombia se encuentra frente a una encrucijada.
En el Día del Reciclaje, que se celebra el 17 de mayo, Colombia se encuentra frente a una encrucijada crítica: el desafío de preservar nuestros recursos hídricos y a su vez, reducir la contaminación plástica que amenaza nuestros océanos y fuentes de agua dulce. Es por ello, que, en este día de reflexión y acción, es urgente que las personas empecemos a reconocer la estrecha relación entre el reciclaje de plásticos y la protección de nuestro preciado recurso vital: el agua.
Y es que con el pasar de los días, el plástico, omnipresente en nuestra vida cotidiana, se ha convertido en una de las mayores amenazas para la salud, no solo de nosotros mismos, sino de un recurso, que al parecer se ha vuelto silencio de cara a muchos: nuestros océanos y sistemas acuíferos. Desde botellas de agua hasta bolsas de compras, el plástico de un solo uso está contaminando nuestros ríos, lagos y mares, poniendo en peligro la vida marina y la calidad del agua que consumimos.
Debido a la mala disposición, la acción del viento y de las lluvias, cada año, millones de toneladas de plástico terminan en nuestros océanos, se han encontrado plásticos a 10.000 metros de profundidad, formando enormes islas de basura y contaminando incluso las regiones más remotas del mundo. Esta contaminación plástica no solo amenaza la biodiversidad marina, sino que también pone en peligro nuestra propia salud, ya que los microplásticos pueden ingresar a nuestra cadena alimenticia a través de los productos marinos que consumimos.
Ejemplo de ello, son los resultados de un relevamiento reciente realizado por YouGov Plc para Greenpeace, con un alarmante 61% la contaminación fue identificada por los encuestados como la mayor amenaza percibida para los océanos a nivel mundial, preocupación que se vio respaldada por los altos niveles de ansiedad sobre la contaminación por plásticos en los océanos de Colombia, con un abrumador 69%, cifra que dejó en evidencia que sin duda los plásticos son la mayor amenaza para los océanos del país.
Si bien, en Colombia, existe un nuevo amanecer en la lucha contra la contaminación plástica por la entrada en vigencia de la ley de plásticos de un solo uso y hace que está legislación no solo represente un paso crucial hacia un futuro más limpio y sostenible, sino que sienta las bases y tiene el potencial de alinear al país con las recomendaciones internacionales de Naciones Unidas, sobre el Tratado Global de Plásticos, los gobiernos locales deben hacer más y ejecutar acciones certeras y congruentes que no queden en el papel. Solo en Colombia, cada persona desecha 24 kilos de plástico anualmente, de los cuales el 74% de los envases termina en rellenos sanitarios, invadiendo las ciudades y contaminando mares, ríos y manglares.
Por eso hoy, en el Día del Reciclaje, hagamos un compromiso colectivo para aumentar nuestros esfuerzos de reciclaje de plásticos y proteger nuestras fuentes de agua dulce y océanos. Esto significa adoptar prácticas de consumo más sostenibles, reduciendo nuestra dependencia de plásticos de un solo uso y optando por alternativas reutilizables siempre que sea posible. El reciclaje no solo es una práctica sostenible, sino también una forma efectiva de proteger nuestras fuentes hídricas y garantizar un futuro más limpio y saludable para todos.
En efecto, nos estamos dirigiendo hacia el desastre y, como el tiempo se acaba, necesitamos un Tratado Mundial sobre los Plásticos que reduzca la producción de esta materia y acabe con el plástico de un solo uso. Si bien Colombia dio un pequeño paso, no hay tiempo que perder en enfoques que no resolverán el problema. Por último, recordemos que el cambio empieza desde casa, las pequeñas acciones también suman.