Implante capilar: claves para evitar estafas y proteger su salud antes de tomar una decisión
Los implantes capilares son una alternativa efectiva contra la alopecia, pero elegir mal puede derivar en complicaciones graves. Conozca las recomendaciones.
Noticias RCN
10:35 a. m.
El interés por recuperar el cabello ha llevado a un notable aumento en la demanda de implantes capilares en Colombia.
Sin embargo, junto con esta tendencia también han surgido riesgos importantes para los pacientes: clínicas sin habilitación, técnicas no avaladas y estrategias de mercadeo engañosas que comprometen la salud y el bolsillo.
Andrés Martínez, CEO de Mediarte, advierte que detrás de muchas promociones llamativas en redes sociales se esconden prácticas poco éticas y procedimientos que no cumplen con estándares médicos.
Según el especialista, la primera señal de alerta es cuando el lugar no cuenta con habilitación de la Secretaría de Salud o no tiene médicos registrados en el RETHUS (Registro Único de Talento Humano en Salud).
De acuerdo con el experto, muchas clínicas informales operan con técnicas improvisadas o personal sin formación en salud.
En algunos casos, incluso se han detectado cobros por folículos capilares que nunca fueron implantados:
Hay lugares donde cobran por lo que extraen, no por lo que realmente implantan, señaló.
¿Qué técnicas sí están respaldadas por la medicina?
De acuerdo con los expertos, las únicas técnicas con respaldo científico para tratar la alopecia son la técnica FUE (Extracción de Unidades Foliculares), el Plasma Rico en Plaquetas (PRP) y la mesoterapia capilar.
Por el contrario, productos que prometen regeneración capilar con shampoos, pastillas milagrosas o “métodos revolucionarios” no cuentan con validación médica y suelen ser una trampa publicitaria.
La realidad es que no existen soluciones mágicas. Incluso con un implante bien realizado, el paciente debe seguir un tratamiento de mantenimiento de por vida
¿Cómo tomar una decisión informada para el implante capilar?
- Verificar que la clínica esté habilitada por la Secretaría de Salud.
- Confirmar que los médicos estén registrados en el RETHUS.
- Desconfiar de ofertas excesivamente económicas o con promesas poco realistas.
- Pedir referencias reales de pacientes y revisar la trayectoria del centro médico.
De acuerdo con Martínez, un buen implante capilar no solo se mide por el resultado estético, sino por la seguridad del proceso.
Si una clínica no muestra su certificado de habilitación, esa ya es una razón suficiente para desconfiar, advirtió.
En un mercado donde la estética ha ganado terreno, la recomendación es clara: informarse, comparar, y no dejarse llevar por el impulso o la publicidad engañosa.