Ansiedad y ataque de ansiedad: ¿Cuáles son sus síntomas y cómo diferenciarlos?
La diferencia entre ansiedad y ataque de ansiedad es grande pero no muchos la conocen. Descubra cuáles son los síntomas que los diferencian.
Noticias RCN
10:30 a. m.
La ansiedad es una respuesta emocional natural ante situaciones de estrés, incertidumbre o peligro. Sin embargo, cuando esta respuesta se vuelve excesiva o incontrolable, puede derivar en un ataque de ansiedad, un episodio mucho más intenso y debilitante.
Aunque ambos términos a menudo se usan indistintamente, es crucial entender que representan experiencias distintas en términos de duración, intensidad y síntomas. Aquí te explicamos las principales diferencias entre la ansiedad y un ataque de ansiedad, así como los síntomas que los distinguen.
Ansiedad: Una respuesta prolongada y generalizada
La ansiedad es una sensación persistente de preocupación o miedo ante situaciones cotidianas. Es un estado emocional que puede durar semanas, meses o incluso años, y se caracteriza por una preocupación constante sobre diversas circunstancias, desde problemas en el trabajo hasta la salud o las relaciones personales. Según un estudio publicado en The Journal of Anxiety Disorders, la ansiedad afecta a millones de personas en todo el mundo y es uno de los trastornos mentales más comunes.
Los síntomas de la ansiedad incluyen:
- Preocupación constante o excesiva.
- Inquietud o sensación de nerviosismo.
- Fatiga.
- Dificultad para concentrarse.
- Irritabilidad.
- Tensión muscular.
- Dificultad para dormir.
- Estos síntomas suelen ser menos intensos que los de un ataque de ansiedad, pero son más prolongados y afectan de manera constante la calidad de vida de la persona.
Ataque de ansiedad: Un episodio breve pero intenso
Un ataque de ansiedad, también conocido como ataque de pánico, es un episodio agudo de miedo extremo que aparece de forma repentina y sin previo aviso. A diferencia de la ansiedad generalizada, un ataque de ansiedad es breve, generalmente dura entre 10 y 30 minutos, pero su intensidad es mucho mayor. Durante un ataque de ansiedad, el cuerpo reacciona como si estuviera en peligro inminente, lo que activa la respuesta de "lucha o huida".
Entre los síntomas más comunes de un ataque de ansiedad se encuentran:
- Palpitaciones o taquicardia.
- Sensación de ahogo o dificultad para respirar.
- Sudoración excesiva.
- Mareos o sensación de desmayo.
- Dolor o malestar en el pecho.
- Sensación de irrealidad o desconexión del entorno.
- Miedo intenso a perder el control o a morir.
- Según un estudio publicado en The American Journal of Psychiatry, los ataques de ansiedad pueden ser tan debilitantes que muchas personas los confunden con un ataque al corazón debido a la intensidad de los síntomas físicos.
Comprender las diferencias para una mejor gestión
Conocer las diferencias entre la ansiedad y un ataque de ansiedad es fundamental para manejar cada situación de manera adecuada. Mientras que la ansiedad puede ser manejada con técnicas de relajación, cambios en el estilo de vida y terapia, los ataques de ansiedad pueden requerir intervenciones más inmediatas y específicas, como la terapia cognitivo-conductual (TCC) o, en algunos casos, medicación.
Si bien la ansiedad es una respuesta normal ante situaciones estresantes, es importante buscar ayuda profesional si se convierte en una constante en la vida diaria o si se experimentan ataques de ansiedad frecuentes. Un diagnóstico adecuado y un tratamiento oportuno pueden mejorar significativamente la calidad de vida y prevenir complicaciones a largo plazo.