Efectos ambientales de las mascarillas usadas durante la pandemia del COVID-19
La investigación reveló la cantidad de microplásticos que hoy contaminan el ambiente.
Noticias RCN
02:42 p. m.
La pandemia a causa del virus COVID-19 ha sido considerada como uno de los hitos más históricos para el mundo entero, pues su alto impacto ambiental, social, económico y político marcó rumbos sin precedentes a los que la humanidad no se enfrentaba en décadas.
Su impacto sigue dejando rezagos, pues una investigación, publicada en el año 2024, reveló las contundentes cifras relacionadas con la contaminación ambiental que algunos productos usados durante este periodo de tiempo generaron en los ecosistemas.
Mascarillas y su impacto ambiental
Según una investigación, publicada en la revista Environmental Pollution, se realizaron miles de millones de toneladas de mascarillas para suplir la necesidad de las personas y evitar el contagio del mortal virus. No obstante, esos utensilios médicos se están descomponiendo mientras se liberan microplásticos y aditivos químicos, incluidos disruptores endocrinos.
“Este estudio ha subrayado la necesidad urgente de repensar cómo producimos, usamos y desechamos las mascarillas faciales”, dijo Anna Bogush del Centro de Agroecología, Agua y Resiliencia de la Universidad de Coventry, autora principal del estudio.
Dentro de las discusiones, que se plantean en la investigación, abre el debate sobre el arma de doble filo que representan estas mascarillas, pues lograron salvar la vida de millones de personas mientras que hoy ponen en riesgo no solo a la humanidad, sino a la salud de los animales y el óptimo estado de los ecosistemas.
Mascarillas que más contaminan
Según las mascarillas examinadas, se determinó que las de referencia FFP2 y FFP3 fueron las que más microplásticos liberaron entre cuatro y seis veces más. Así mismo, se explicó que, ante la ausencia de un óptimo sistema de reciclaje, una gran cantidad de estos utensilios terminaron en los alcantarillados y ecosistemas acuáticos.
“Los tamaños de partículas de los microplásticos variaron mucho, desde alrededor de 10 μm hasta 2082 μm, pero las partículas microplásticas por debajo de 100 μm fueron predominantes en los lixiviados de agua”, se reza en la investigación.
Otro de los descubrimientos más polémicos corresponde al de la identificación de bisfenol B, un disruptor endocrino que actúa como estrógeno al ser absorbido por humanos y algunos animales.