El sedentarismo en niños y su impacto en la salud mental: un asunto de preocupación
Según la Organización Mundial de la Salud, aproximadamente el 81% de los adolescentes en el mundo no realizan actividad física ocasionando el sedentarismo.
Noticias RCN
12:01 a. m.
El sedentarismo en niños se ha convertido en un problema de salud pública global con repercusiones significativas en la salud mental de esta población. La falta de actividad física y el exceso de tiempo dedicado a actividades sedentarias, como ver televisión o jugar videojuegos, están relacionados con una serie de problemas de salud mental en los niños.
Sedentarismo en niños: una preocupación mundial
Según datos proporcionados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), aproximadamente el 81% de los adolescentes en el mundo no realizan suficiente actividad física, y esta tendencia se observa cada vez a edades más tempranas. Esto es motivo de preocupación, ya que diversos estudios han demostrado que el sedentarismo en la infancia está asociado con un mayor riesgo de desarrollar trastornos de salud mental, como la ansiedad y la depresión.
De acuerdo con este problema, la Dra. María Pérez, psicóloga infantil del Hospital Infantil de Madrid, señala que "el ejercicio físico regular es fundamental para el desarrollo cognitivo y emocional de los niños. Cuando los niños no se mueven lo suficiente, pueden experimentar dificultades para regular sus emociones y enfrentar el estrés".
La falta de actividad física puede afectar negativamente el estado de ánimo de los niños, ya que el ejercicio libera endorfinas, neurotransmisores que ayudan a reducir el estrés y mejorar el estado de ánimo. Además, el sedentarismo puede contribuir al desarrollo de problemas de autoestima y confianza en sí mismos, especialmente si los niños se comparan con sus pares más activos.
Lea además: Compañeros de curación: la terapia asistida con animales ilumina el camino para pacientes con demencia
Medidas para evitar el sedentarismo en niños
La Dra. Pérez también destaca que "el sedentarismo en la infancia puede establecer patrones de comportamiento que perduren hasta la edad adulta, aumentando el riesgo de problemas de salud mental a lo largo de la vida". Por lo tanto, es fundamental promover un estilo de vida activo desde una edad temprana y limitar el tiempo dedicado a actividades sedentarias.
Para abordar este problema, es necesario un enfoque multidisciplinario que involucre a padres, educadores y profesionales de la salud. Es fundamental fomentar la actividad física en el hogar y en la escuela, proporcionar oportunidades para el juego activo y limitar el tiempo frente a pantallas.
De esta manera, el sedentarismo en la infancia no solo afecta la salud física de los niños, sino también su bienestar emocional y mental. Es imperativo tomar medidas para promover un estilo de vida activo y saludable desde una edad temprana, garantizando así un desarrollo integral y equilibrado de los niños.