Estas son las posturas menos recomendadas para dormir, según quiropráctico
El especialista reveló algunas de las peores posiciones para el cuerpo a la hora de descansar.
Noticias RCN
03:14 p. m.
Dormir ha sido considerado como uno de los mayores placeres para las personas por lo que especialistas han revelado la importancia de un buen sueño para reparar el cuerpo por medio del descanso.
Aunque hay varias formas de acostarse a dormir, durante la noche, no todas serían del todo beneficiosas para el cuerpo, los huesos, las articulaciones y la musculatura. Por esto, un quiropráctico compartió, por medio de sus redes sociales, algunas de las posiciones que definitivamente se deben corregir.
Posiciones que se deben evitar al dormir
Según Francesc Moreno, quiropráctico y terapeuta especialista en Barcelona, algunas posturas a la hora de dormir pueden afectar, de manera importante, varias zonas del cuerpo y algunos procesos como la respiración. Algunas de estas son:
Dormir boca abajo
Aunque es una de las más comunes, dormir boca abajo tiene serias repercusiones sobre la columna vertebral ya que se puede generar tendinitis, dolor cervical o lumbar. Así mismo, está relacionado con la rigidez lumbar, presión sobre la caja torácica y compresión sobre las arterias que pueden llevar a generar sensación de hormigueo.
Dormir sobre tres almohadas
Según el especialista, dormir con la cabeza sobre más de una almohada es sumamente perjudicial para la salud de las personas ya que se pueden aumentar los riesgos de que la columna vertebral pueda desalinearse. Así mismo, se puede generar tensión en el cuello y la espalda.
Decúbito lateral o de lado
Cuando el cuerpo reposa sobre las extremidades se pueden presionar los nervios y se causa estrés en los músculos del brazo. No es una postura recomendada para aquellas personas que han sufrido accidentes en algunos de sus hombros.
Dormir sin almohada
Esta posición favorece la aparición del reflujo. Así mismo, favorece los ronquidos, la apnea del sueño, mientras que, por la gravedad, la lengua se desplaza a la parte posterior de la faringe generando una obstrucción de las vías aéreas.