¿Hilo dental o irrigador bucal?: expertos explican el más eficaz
Los especialistas explicaron la importancia de mantener la higiene bucal por medio de las mejores herramientas.
Noticias RCN
08:24 p. m.
La limpieza dental es parte fundamental para mantener la salud de las personas por lo que establecer rutinas diarias es de suma importancia. Sin embargo, la creación de nuevos dispositivos de limpieza ha propuesto importantes debates sobre su eficacia y adaptación a las necesidades de las personas.
¿Hilo dental o irrigador bucal?
Según el portal Mayo Clinic, es importante tener claro que ambos objetos cumplen funciones distintas, dentro de las prácticas de limpieza e higiene dental. El hilo dental es ideal para limpiar los espacios entre los dientes y eliminar la placa, un material de consistencia pegajosa que se logra acumular en zonas donde las cerdas del cepillo no llegan. Esta práctica permite cuidar, reducir el sangrado y evitar enfermedades en las encías.
Por otro lado, el irrigador bucal, un dispositivo que dirige un chorro de agua a potencia, ayuda a eliminar las partículas de comida que se posan entre los dientes, de modo que, también puede remover la placa.
Aunque ambos permiten la desinfección, el irrigador bucal está asociado a un uso más sencillo, en comparación con el hilo dental. Este dispositivo puede ser de mayor utilidad para las personas que poseen frenos dentales o demás artefactos de ortodoncia.
Así mismo, el irrigador bucal permite facilitar este proceso de desinfección ya que su utilidad beneficia a los pacientes que pueden presentar problemas para hacer uso del hilo dental.
Frecuencia en el uso del hilo dental
Algunos médicos especialistas sugieren la limpieza y el uso del hilo dental una vez al día mientras que el cepillado se debe hacer, como mínimo, dos veces al día. Así mismo, el portal insta a realizarse revisiones periódicas, con especialistas, para controlar la salud bucodental.
De esta manera, expertos aseguran que cada método de desinfección dental otorga beneficios diferentes por lo que cada paciente debe asegurarse de su respectivo funcionamiento para que se adapte a sus necesidades.