La fruta poderosa que ayuda a prevenir el cáncer de próstata y controlar la glucosa en la sangre
La búsqueda de alimentos que contribuyan a la salud ha llevado a los expertos a descubrir que una fruta común podría desempeñar un papel crucial en la prevención del cáncer de próstata.
Noticias RCN
07:00 a. m.
La salud masculina es un tema de creciente interés, especialmente en lo que respecta a la prevención de enfermedades crónicas como el cáncer de próstata y la diabetes.
En este contexto, un estudio reciente ha destacado el papel de una fruta específica: el tomate. Investigaciones han demostrado que el consumo regular de tomates puede ofrecer beneficios significativos, tanto en la prevención del cáncer de próstata como en la regulación de los niveles de glucosa en la sangre.
¿Cómo puede el tomate prevenir el cáncer de próstata?
Un estudio publicado en la revista Cancer Epidemiology, Biomarkers & Prevention reveló que el licopeno, un antioxidante presente en los tomates, puede reducir el riesgo de cáncer de próstata en un 20% al 30%.
El licopeno actúa combatiendo el estrés oxidativo y reduciendo la inflamación, factores que contribuyen al desarrollo del cáncer. Investigadores de la Universidad de Harvard también encontraron que hombres que consumían productos a base de tomate al menos tres veces a la semana tenían un menor riesgo de desarrollar esta enfermedad en comparación con aquellos que no lo hacían.
Además, el licopeno se absorbe mejor cuando el tomate se cocina, lo que hace que las salsas y los jugos de tomate sean opciones muy efectivas para maximizar sus beneficios. Este hallazgo subraya la importancia de incluir esta fruta en la dieta diaria, no solo como un acompañamiento, sino como un elemento central en la prevención del cáncer.
¿Qué relación existe entre el tomate y la reducción de la glucosa en la sangre?
El consumo de tomates también ha mostrado efectos positivos en la regulación de los niveles de glucosa en la sangre. Un estudio publicado en el Journal of Nutrition encontró que el licopeno y otros antioxidantes en los tomates pueden mejorar la sensibilidad a la insulina y disminuir los niveles de azúcar en personas con diabetes tipo 2.
Esta fruta es rica en fibra, lo que ayuda a estabilizar los niveles de glucosa, evitando picos que pueden ser dañinos para la salud.
Asimismo, una investigación realizada por la Universidad de Ciencias de la Salud de Shiraz en Irán demostró que el consumo diario de tomate puede contribuir a la disminución de la hemoglobina A1c, un indicador clave en el control de la diabetes. Esto sugiere que incorporar tomates en la dieta puede ser una estrategia efectiva para quienes buscan manejar su diabetes y mejorar su salud general.
El tomate no solo es un ingrediente versátil y delicioso, sino que también se ha demostrado que tiene propiedades preventivas en enfermedades graves como el cáncer de próstata y la diabetes. Incluir esta fruta en la dieta puede ser una simple, pero poderosa, herramienta para mejorar la salud masculina y promover el bienestar general.