La relación entre el avistamiento de aves y la salud mental: evidencia científica y beneficios

El avistamiento de aves, una actividad aparentemente simple y natural, ha demostrado tener efectos profundos en la salud mental.

Diversos estudios científicos y testimonios personales corroboran que interactuar con la naturaleza, y en particular con las aves, puede reducir el estrés, mejorar el estado de ánimo y aumentar el bienestar general.

Importancia del avistamiento de aves en la salud mental

Un estudio publicado en la revista BioScience en 2017, llevado a cabo por la Universidad de Exeter, University of Queensland y British Trust for Ornithology, reveló que las personas que viven en áreas con más aves, arbustos y árboles experimentan menores niveles de depresión, ansiedad y estrés.

El estudio se realizó en barrios urbanos en el sur de Inglaterra, y se encontró una correlación significativa entre el número de aves que las personas pueden ver en una tarde típica y su estado de salud mental. Los investigadores sugieren que la presencia de aves y la biodiversidad en el entorno cotidiano pueden contribuir al bienestar psicológico de los individuos.

¿Qué tanto influye la observación de aves en la salud mental?

Además, la revista Ecopsychology publicó un artículo en 2019 que discutía cómo la observación de aves puede servir como una forma de meditación activa. Esta práctica puede llevar a una mayor conciencia y conexión con el entorno, promoviendo un estado de relajación y calma. El estudio destacaba que el avistamiento de aves requiere de atención plena, lo que puede desviar la atención de las preocupaciones diarias y ayudar a mitigar síntomas de estrés y ansiedad.

Un informe del National Audubon Society, una organización estadounidense dedicada a la conservación de las aves, también respalda estos hallazgos. El informe menciona que la actividad de observar aves en entornos naturales fomenta la socialización y la actividad física, ambos factores importantes para mantener una buena salud mental. La participación en grupos de avistamiento de aves puede fortalecer las conexiones sociales y reducir sentimientos de soledad, mientras que caminar y estar al aire libre mejora la condición física y el bienestar emocional.

Asimismo, un artículo de la revista Scientific Reports en 2020 destacó que los espacios verdes y la fauna aviar pueden ser cruciales para la recuperación del estrés. El estudio encontró que la simple vista de aves desde una ventana o en un paseo puede tener un impacto positivo significativo en la recuperación del estrés.

Del mismo modo, la psicóloga ambiental Rachel Kaplan, en su libro "The Experience of Nature: A Psychological Perspective", también enfatiza que la exposición a la naturaleza, incluida la observación de aves, puede mejorar la salud cognitiva y emocional. Kaplan argumenta que los entornos naturales proporcionan un escape de la vida urbana acelerada, ofreciendo un espacio para la reflexión y el descanso mental.

Sin duda, la práctica del avistamiento de aves no solo permite apreciar la belleza y diversidad de la fauna aviar, sino que también ofrece numerosos beneficios para la salud mental. Desde la reducción del estrés y la ansiedad hasta la mejora del estado de ánimo y la promoción del bienestar general, esta actividad accesible y económica se perfila como una herramienta valiosa para el cuidado de la salud mental en la sociedad contemporánea.