¿Las carillas dentales producen mal aliento?
Cada vez más personas optan por tratamientos estéticos como las carillas que han ganado popularidad como una solución estética rápida y efectiva para mejorar la sonrisa.
Noticias RCN
03:31 p. m.
Aunque los tratamientos estéticos como las carillas han ganado aceptación por su eficacia en mejorar la sonrisa, su colocación inadecuada puede provocar problemas como mal aliento debido a la acumulación de residuos entre las carillas y las encías.
Un procedimiento mal ejecutado puede ocasionar desgaste dental, inflamación de las encías y pérdida ósea, incrementando el riesgo de enfermedades periodontales si no se siguen adecuadamente las pautas de cuidado.
Para evitar complicaciones, es esencial elegir clínicas con odontólogos certificados y mantener una rigurosa higiene bucal, incluyendo cepillado, uso de hilo dental y visitas regulares al odontólogo para asegurar el buen estado de las carillas.
Las carillas y su relación con el mal aliento
Este tratamiento no está exento de controversias dentro del gremio odontológico, especialmente por su posible relación con el mal aliento.
Expertos afirman que este problema puede surgir como consecuencia de un mal ajuste de las carillas. Explican que cuando no se colocan correctamente, pueden generarse espacios diminutos entre las carillas y las encías, permitiendo la acumulación de residuos de comida y placa bacteriana.
Robin Gutiérrez, gerente general de la red odontológica Sonría, asegura que "si las carillas no se colocan adecuadamente o se dañan, pueden convertirse en un foco de acumulación de placa bacteriana y residuos alimenticios, lo que incrementa el riesgo de mal aliento, inflamación y problemas de encías".
La falta de una higiene oral adecuada puede agravar estos problemas, por lo que es fundamental mantener rutinas de limpieza estrictas y realizar visitas periódicas al odontólogo para garantizar una buena salud bucal.
Otras afectaciones de las carillas dentales
En cuanto a la funcionalidad, puede generar algunas incomodidades durante el periodo de adaptación, afectando tanto la masticación como el habla.
Si no se realizan con precisión, las carillas pueden alterar la pronunciación de ciertos sonidos o incluso dificultar la correcta masticación de algunos alimentos.
Gutiérrez aseguró que existen varios tipos de carillas, pero las de resina compuesta son las que pueden generar dificultades en la higiene oral, lo que podría derivar en problemas de halitosis.
Esto se debe a que son menos duraderas en comparación con otros materiales como las de cerámica, generando mayor riesgo de fracturas, lo que puede resultar en costos adicionales y molestias recurrentes.
Las desventajas de las carillas dentales
- Desgaste dental: Si las carillas no se adhieren correctamente o el paciente no sigue las pautas de cuidado recomendadas, los dientes naturales pueden sufrir desgaste prematuro, lo que en casos graves puede llevar a la pérdida del diente.
- Inflamación de las encías: La acumulación de placa en los bordes de las carillas puede provocar la inflamación de las encías, aumentando el riesgo de desarrollar enfermedades periodontales.
- Pérdida ósea: Si la inflamación de las encías no se trata adecuadamente, puede afectar el hueso que sostiene los dientes, resultando en pérdida ósea.
¿Cómo evitar complicaciones con las carillas dentales?
Es muy importante elegir clínicas que cuenten con especialistas certificados y con experiencia en este tipo de tratamientos. La correcta colocación de las carillas depende en gran medida de la habilidad del odontólogo, por lo que es fundamental confiar en un profesional capacitado.
Después de la colocación, mantener una estricta higiene bucal es esencial: cepillarse adecuadamente, usar hilo dental y enjuagues bucales específicos ayudan a prevenir la acumulación de placa y restos de alimentos en los bordes de las carillas.
Además, las visitas regulares al odontólogo son vitales para detectar y corregir posibles problemas a tiempo, asegurando que las carillas se mantengan en buen estado y sin complicaciones.
Es importante tener en cuenta que el mal aliento puede no solo deberse a carillas mal colocadas, sino también a una limpieza inadecuada. Por ello, quienes usan carillas deben ser especialmente meticulosos con la limpieza entre los dientes y alrededor de las carillas para evitar la acumulación de bacterias.