Estudios revelan por qué NO debe usar su celular al despertarse

El hábito de revisar el celular apenas se despierta es común en la rutina diaria de muchas personas. Sin embargo, diversos estudios sugieren que esta práctica podría tener efectos negativos en la salud mental y física.

Desde el incremento del estrés hasta el impacto en la productividad y el estado de ánimo, el uso del teléfono móvil en los primeros minutos del día puede perjudicar nuestro bienestar. En este artículo exploramos por qué no es recomendable usar el celular justo al despertar y qué dicen los estudios al respecto.

La dependencia tecnológica y la creciente necesidad de estar conectados en todo momento hacen que el celular sea lo primero que muchas personas toquen al iniciar su día. Sin embargo, esta costumbre podría estar interfiriendo con una rutina saludable.

El impacto en la salud mental: Estrés y ansiedad al inicio del día

Un estudio realizado por la Universidad de Harvard indica que revisar el celular al despertar aumenta los niveles de estrés y ansiedad. La razón principal es que, al interactuar con notificaciones de correos electrónicos, redes sociales y mensajes de trabajo, el cerebro se expone a un gran volumen de información en un corto período. Esto activa la respuesta de "lucha o huida", lo que genera una sobrecarga emocional y pone a la persona en un estado de alerta nada más empezar el día.

El doctor Nikole Benders-Hadi, psiquiatra, explica que comenzar el día mirando el teléfono impide a las personas planificar el día de manera tranquila. En lugar de comenzar la mañana con una actividad relajante, como meditar o tomar un desayuno tranquilo, el cerebro se satura de estímulos, lo que impacta negativamente el enfoque y la productividad.

La relación con la productividad y el bienestar general

Además del aumento del estrés, el uso del celular al despertar afecta negativamente la productividad. Un estudio publicado en el Journal of Behavioral Addictions encontró que las personas que revisan sus teléfonos nada más levantarse tienden a experimentar una mayor dificultad para concentrarse en las tareas importantes durante el día. Esta distracción temprana interfiere con la capacidad de establecer prioridades y disminuye la eficiencia a lo largo del día.

Otra investigación realizada por la Universidad de Nottingham Trent sugiere que el hábito de revisar el celular inmediatamente al despertar interrumpe el proceso de "desconexión" que el cerebro necesita durante el sueño. Al no dar tiempo suficiente para que el cerebro salga del modo de descanso, la fatiga mental puede persistir, afectando el rendimiento cognitivo y emocional durante el resto de la jornada.