¿Qué hacer en caso de que le duela la rodilla? Siga este paso a paso

El dolor de rodilla es una queja común que puede afectar a personas de todas las edades y estilos de vida.

Ya sea debido a una lesión, afecciones médicas subyacentes o el desgaste normal, el dolor en esta articulación puede limitar la movilidad y afectar la calidad de vida.

Aquí hay algunos pasos recomendados para abordar el dolor de rodilla de manera efectiva, respaldados por estudios médicos.

Paso a paso de lo que debe hacer en caso de que le duela la rodilla

• Descanso y protección: En caso de dolor agudo o después de una lesión, es importante descansar la rodilla afectada para permitir que se recupere.

Evita actividades que puedan empeorar el dolor, como correr o saltar. Se ha demostrado en estudios que el reposo relativo puede reducir la inflamación y facilitar la recuperación de la articulación.

• Aplicación de hielo: Aplicar hielo en la rodilla durante 15-20 minutos varias veces al día puede ayudar a reducir la inflamación y aliviar el dolor. Esto se debe hacer preferiblemente durante las primeras 48 horas después de la lesión o cuando el dolor es agudo.

Estudios respaldan lo que debe hacer en caso de presentar esta molestia

• Compresión y elevación: Usar un vendaje elástico o una envoltura de compresión alrededor de la rodilla puede ayudar a reducir la hinchazón y proporcionar estabilidad.
• Ejercicios de fortalecimiento y ​​flexibilidad: Una vez que el dolor agudo haya disminuido, es importante comenzar con ejercicios suaves de fortalecimiento y ​​flexibilidad para rehabilitar la rodilla.

Estos pueden incluir ejercicios de bajo impacto como estiramientos suaves, ejercicios de fortalecimiento de cuádriceps y ejercicios de equilibrio.

Los estudios han demostrado que el ejercicio regular puede ayudar a reducir el dolor y mejorar la función en personas con dolor de rodilla crónico.

• Medicamentos y terapia física: En algunos casos, se pueden recetar medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINE), como el ibuprofeno o el naproxeno, para ayudar a reducir el dolor y la inflamación.

Un médico puede realizar un diagnóstico preciso y recomendar un plan de tratamiento adecuado, que puede incluir opciones como inyecciones de corticosteroides, terapia de ultrasonido o, en casos graves, cirugía.