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Descifran genoma de la peligrosa mosca tse-tse

El insecto transmite la enfermedad del sueño entre los humanos y afecta al ganado en África.


Noticias RCN

abr 25 de 2014
10:41 a. m.

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Después de 10 años de trabajos, un equipo internacional de científicos ha descifrado el código genético de la mosca tse-tse, el insecto que propaga en África la enfermedad del sueño, con la esperanza de que sus secretos biológicos puedan ser utilizados para erradicar esta enfermedad.
"Los científicos han descifrado el código genético de la mosca parasitaria tse-tse, alentando la esperanza de que este avance ayudará a futuros esfuerzos para controlar una de las más devastadoras enfermedades del ganado en el África subsahariana, extendida por el insecto", anunció el el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), uno de los organismos que participa en la investigación.
Secuenciar el genoma de la mosca tse-tse expuso los pilares de su extraña biología: dan a luz a sus crías en vez de poner huevos como otros insectos, nutren a la larva dentro del útero con una especie de leche, son extrañamente atraídas a los colores azul y negro y se alimentan exclusivamente de sangre.
Ante este descubrimiento, los científicos expresaron su optimismo ante la posibilidad de que el proyecto pudiera llevar a nuevas formas de combatir a la mosca, como una sustancia química que pudiera interferir en su reproducción o maneras de mejorar las trampas existentes que se utilizan para matarla.
La mosca tse-tse transmite el parasito Trypanosoma brucei, que en los humanos produce la enfermedad del sueño y que afecta también en África a unos tres millones de animales domésticos, lo que causa una grave reducción de la producción agrícola y aumenta la escasez de alimentos.
Las personas que son picadas por moscas que portan ese parasito pueden desarrollar esa enfermedad, mortal si no es tratada adecuadamente.
Aún no existe ninguna vacuna, ya que el parasito es capaz de eludir el sistema inmune de los mamíferos, por lo que los sistemas de control actuales se centran en la erradicación de las poblaciones de moscas.
Además del uso de pesticidas y de la captura mediante trampas, en la lucha contra la tse-tse se usa la técnica de esterilización por radiación que aplican el OIEA y la FAO.
"No es un avance directo, inmediato, pero a medio plazo es un avance importantísimo porque entender y decodificar el genoma de la mosca va a dar mucha información para desarrollar métodos mejores en un futuro", explicó Jorge Hendrichs, jefe de control de la sección de Lucha contra Plagas de Insectos de OIEA/FAO.
Hendrichs explicó que la decodificación del ADN ayudará a entender mejor los procesos biológicos de la mosca y mejorará esta técnica, por la que se sueltan millones de insectos machos estériles, previamente inmunizados contra el parasito.
Como las hembras suelen aparearse en pocas ocasiones, o incluso sólo una, el cruce con los machos estériles puede provocar la desaparición de la población de moscas en una zona.
De momento, esas moscas inmunizadas y esterilizadas en laboratorio solo se liberan en regiones donde hay especies de tse-tse que solo atacan al ganado, ya que aún existe un ligero riesgo de que los insectos no sean completamente resistentes al parásito y puedan transmitir la enfermedad.
Ahora, con la nueva información genética en la mano, se abre la posibilidad futura de utilizar esa técnica en zonas donde la tse-tse afecta también a los humanos.
Respecto al ganado, Hendrichs explicó que protegerlo de la mosca es esencial para asegurar mejores cosechas en África, ya que los animales son esenciales para trabajar el campo y transportar los productos agrícolas en zonas poco desarrolladas.
"El problema del ganado es muy serio puesto que la agricultura no se puede llevar a cabo porque el ganado muere por la mosca. Hay partes muy verdes en África, con agua, con clima excelente y sin embargo no hay agricultura porque la mosca mata el ganado", indicó el experto mexicano.
"En Europa, en Asia, en América Latina, el ganado ha sido la base del desarrollo agrícola, y en muchas partes de África esto no ha sido posible porque tienen a la mosca tse-tse", recordó Hendrichs.
Una de las contribuciones del OIEA y la FAO a la decodificación del genoma de la mosca ha sido el análisis de la relación de este insecto con una bacteria simbiótica, la Wolbachia, cuya relación con la tse tse es tal que llega a alterar el comportamiento y la biología del insecto.
Según Hendrichs, se ha detectado que esa bacteria puede llegar a bloquear en mosquitos la transmisión de virus y otros parásitos, por lo que entender bien la relación puede ser un aliado en la lucha contra la propagación de enfermedades.
Los descubrimientos anunciados son la culminación de un estudio multimillonario en el que han participado más de 140 científicos de 78 instituciones investigadoras en 18 países.
Agencias
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